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Páginas: 2 (283 palabras)
Publicado: 13 de septiembre de 2013
El Apogeo de los imperios coloniales,
las nuevas potencias y el mundo colonial
La formación de la primera orden mundial fue una empresa compartida por las cinco potencias atlánticasEspaña, Portugal, Holanda, Francia e Inglaterra.
La segunda orden mundial fue, durante sus inicios y gran parte de su desarrollo, una empresa reservada casi exclusivamente a GranBretaña.
Desde fines del siglo XVIII hasta la primera mitad del siglo XIX existía, en efecto un vacío de poder en el escenario internacional que fue resuelto por el único país en condicionesde asumir el liderazgo del nuevo orden global.
Alemania, Estados Unidos y Japón competirían por el reparto del poder en el nuevo orden global a partir de la segunda mitad del siglo XIX.Solo Gran Bretaña mantuvo, incluso en plenas guerras napoleónicas, uno de los objetivos fundamentales de su estrategia nacional: construir un orden global de alcance planetarioarticulado con su propio proceso de desarrollo interno.
A fines del siglo XVIII y principios del XIX, ninguna de la potencias atlánticas continentales tenia posibilidad alguna de influir en laformación del segundo orden mundial, Esto no era solo resultado de los acontecimientos desatados por la Revolución Francesa. Reflejaba, al mismo tiempo, transformaciones ycircunstancias para la declinación de España y Portugal, el reducido poder tangible de Holanda y la tradicional prioridad francesa por los acontecimientos europeos respecto de la expansión deultramar. Tampoco existían, nuevos protagonistas de peso en el escenario internacional.
En las últimas décadas del siglo XVIII, además de la Revolución Francesa de 1789 se produjo otroacontecimiento trascendente. Poco, antes las colonias británicas en America del Norte se alzaron contra su metrópolis.
Gran Bretaña comprometió a todos los medios y recursos de Europa
las nuevas potencias y el mundo colonial
La formación de la primera orden mundial fue una empresa compartida por las cinco potencias atlánticasEspaña, Portugal, Holanda, Francia e Inglaterra.
La segunda orden mundial fue, durante sus inicios y gran parte de su desarrollo, una empresa reservada casi exclusivamente a GranBretaña.
Desde fines del siglo XVIII hasta la primera mitad del siglo XIX existía, en efecto un vacío de poder en el escenario internacional que fue resuelto por el único país en condicionesde asumir el liderazgo del nuevo orden global.
Alemania, Estados Unidos y Japón competirían por el reparto del poder en el nuevo orden global a partir de la segunda mitad del siglo XIX.Solo Gran Bretaña mantuvo, incluso en plenas guerras napoleónicas, uno de los objetivos fundamentales de su estrategia nacional: construir un orden global de alcance planetarioarticulado con su propio proceso de desarrollo interno.
A fines del siglo XVIII y principios del XIX, ninguna de la potencias atlánticas continentales tenia posibilidad alguna de influir en laformación del segundo orden mundial, Esto no era solo resultado de los acontecimientos desatados por la Revolución Francesa. Reflejaba, al mismo tiempo, transformaciones ycircunstancias para la declinación de España y Portugal, el reducido poder tangible de Holanda y la tradicional prioridad francesa por los acontecimientos europeos respecto de la expansión deultramar. Tampoco existían, nuevos protagonistas de peso en el escenario internacional.
En las últimas décadas del siglo XVIII, además de la Revolución Francesa de 1789 se produjo otroacontecimiento trascendente. Poco, antes las colonias británicas en America del Norte se alzaron contra su metrópolis.
Gran Bretaña comprometió a todos los medios y recursos de Europa
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