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stos son los tres componentes del poder. Toda forma de poder esta formada por una combinación de estos elementos. Se manifiestan mediante diferentes expresiones (amenaza, persuasión y reputación) que pretenden producir diversas actitudes (temor, convicción y confianza) con el fin de que otros actores hagan o dejen de hacer algo.

El problema de la distinción es que es útil sobre todo en teoría,ya que en la práctica cualquier forma de poder busca los tres caminos y se trata más bien de cuantificar hasta que punto uno u otro son más representativos.

¿Cómo se manifiesta el poder político?


En este otro esquema, Vallés plantea tres niveles de intervención política que van desde la participación de todos los actores en el conflicto, pasando por un nivel intermedio en el que algunosevitan que el conflicto se regule y el nivel final, en el que éstos consiguen influir sobre a conciencia de todos haciendo que el problema no se vea como tal.

Parece un proceso contrario que complementa al modelo de “Etapas de politización”. Este modelo concebiría el poder político como el poder de una élite que intenta evitar la politización para mantener el statu quo. Aunque en la realidad,que como siempre es más compleja, todos los actores estarían luchando por la agenda, intentando que se politicen unas cuestiones e intentando apartar otras del ágora.

La otra cara del poder: la legitimidad


La legitimidad es una necesidad del poder. Ninguna forma de poder renuncia a proyectarse en los otros con la apariencia de una situación justa. El poder tiene dos caras, “la fuerza delleón y la astucia del zorro” (Maquiavelo): La fuerza del león es su capacidad de coacción y amenaza. La astucia del zorro, sus argumentos y capacidad de convencer de que su presencia es conveniente y adecuada.

En la realidad, por supuesto, ambas se entremezclan y se confunden. La necesidad de legitimidad viene dada por el hecho de que los demás actores, además de no estar muy contentos con serarañados, también tienen garras.

¿De dónde nace la legitimidad?


Diferentes sistemas políticos se han dotado de diferentes fuentes de legitimidad. Weber propuso la tradición, la racionalidad y el carisma como fuentes. Vallés añade el rendimiento.

En occidente, hoy en día, parece que la racionalidad destaca sobre las demás fuentes, aunque ciertos aspectos de la vida (quizá más la social que lapolítica) siguen legitimados por la tradición, y el carisma sólo aparece en situaciones excepcionales, normalmente de crisis (De Gaulle). El rendimiento afecta sobre todo a las zonas de disenso del sistema, provoca cambios de Gobierno pero no parece probable que pueda fundar un nuevo sistema político diferente de la democracia liberal.

En ese sentido, las monarquías árabes sí que se basan enel rendimiento, aunque Vallés no dice que también mucho en la tradición y probablemente gran parte de su éxito como sistema se debe a la forma en que utilizan la fuerza coactiva, es decir en la cara opuesta a la legitimidad.

Legitimidad, legalidad y constitución


En el último epígrafe se trata de la diferencia entre la legalidad y la legitimidad. La legalidad comporta la adecuación a la leyvigente y la legitimidad la adecuación a un sistema de valores. Una es un concepto jurídico y la otra un concepto moral. Para que el poder político sea fuerte y estable, ambas deben coincidir lo máximo posible.

Esto es muy difícil, porque en una sociedad siempre se dan diversas subculturas con sistemas de valores diferentes de los mayoritarios, aunque ese sería el ideal a perseguir.CONCLUSIONES


La definición de la política como “gestión del conflicto social” es útil como noción instrumental, aunque no nos sirve para saber de qué se trata exactamente o para asegurar a ciencia cierta si una situación o problema específico entra en el ámbito de la política o no.

Las fronteras de nuestro objeto de estudio se mueven constantemente y ni siquiera es sencillo saber qué es lo que...