"Dinner Party" Decodificacion Sinbolica
Páginas: 11 (2540 palabras)
Publicado: 29 de noviembre de 2012
Un embarazo de treinta años
En marzo de 1979 se abre al público la exposición “The Dinner Party” (La Cena), de Judy Chicago, causando gran impacto en el mundo artístico, a tal punto que, incluso fue comparada con lo sucedido a principios del siglo XX, por la primera exposición Impresionista.
Durante los tres meses de exhibición, en el Museo de Arte Moderno de SanFrancisco, hubo largas filas casi todos los días, siendo vista por un total de 100.000 personas.
The Dinner Party es una gran instalación, donde a primera vista se encuentra una mesa en forma de triangulo equilátero, la cual cuenta con trece puestos por cada uno de sus lados, haciendo un total de treinta y nueve puestos para sus “invitadas de honor”. Sólo con la descripción anterior, a grandesrasgos, la obra tiene inmediatamente vinculación con la Última Cena (de la tradición iconográfica cristiana). Son innumerables las obras que citan, remiten o se asocian de un modo u otro con todo lo que ella conlleva. Pues bien, The Dinner Party fue la primera que problematizó el hecho de que sus trece asistentes fueran hombres.
Judy Chicago, invita a su mesa exclusivamente a mujeresdestacadas a lo largo de todos los tiempos. Ante la evidencia del sesgo androcéntrico que gobierna la historia y la historiografía tradicional, ante un constante dualismo ontológico que se arranca de Grecia y que concibe a los hombres como agentes activos, racionales y civilizados y a las mujeres como elementos reactivos, irracionales y naturales[1]. Las teorías feministas coinciden en la necesidad deponer fin a la dominación masculina y de abrir simultáneamente espacios discursivos de redefinición de la identidad de las mujeres, reivindicando y destacando los aportes del género femenino a partir de un profundo cuestionamiento al paradigma dominador-masculino que atraviesa la cultura occidental. En la instalación, las protagonistas indiscutidas son los mujeres, reales o imaginarias, de todos loslugares y de todos los tiempos, que al unísono alzan sus voces en contra del monopolio del poder masculino; mujeres que anhelan transmitir sus experiencias, mujeres que necesitan recuperar su cuerpo, mujeres que ya no se conforman con una existencia pasiva. Esta idea de enaltecer y santificar el rol femenino se ve reforzada por la poderosa simplicidad de la forma triangular de la mesa, que seasocia con la divinidad, confiriéndole un “manto” de sacralidad a la obra.
El hecho de que la artista haya elegido una mesa como objeto principal y articulador de la obra ( en desmedro de su primera idea que era, solamente, colgar los platos sobre la pared), se puede leer como una doble asociación, ya que por una parte, la mesa remite al aspecto religioso, remarcado por la indumentaria, ala cual nos referiremos a continuación. Asimismo se vincula al aspecto doméstico, conteniendo el rol femenino histórico, dando cuenta del trabajo “ no reconocido” de la mujer, pero de igual manera ensalzándolo, sacralizando y honrando estos quehaceres, llevándolos así, a un plano superior.
El sentido religioso está remarcado por la ropa que cubre la mesa. No podemos referirnos a ellacomo un simple mantel, ya que claramente existe una conexión con la iconografía eclesiástica. La mesa está cubierta por un manto blanco con una delicada línea dorada la cual se extiende a lo largo de sus bordes, pero son las tres esquinas las que nos brindan una visualidad aún mas clara, fuertemente ligada a un aspecto ceremonial, convirtiendo a esta gran mesa en un singular altar.
La obracuenta con tres corredores llamados “Millennium Runners”, simbolizados por la letra M ; la cual está incorporada en el elaborado diseño de las esquinas. Al darles este nombre, Judy Chicago, tenía la esperanza que para el cambio de milenio la discriminación femenina terminara por completo. Hoy en día, que nuestra mirada se sitúa a comienzos del siglo XXI, podemos asegurar que esta situación de...
En marzo de 1979 se abre al público la exposición “The Dinner Party” (La Cena), de Judy Chicago, causando gran impacto en el mundo artístico, a tal punto que, incluso fue comparada con lo sucedido a principios del siglo XX, por la primera exposición Impresionista.
Durante los tres meses de exhibición, en el Museo de Arte Moderno de SanFrancisco, hubo largas filas casi todos los días, siendo vista por un total de 100.000 personas.
The Dinner Party es una gran instalación, donde a primera vista se encuentra una mesa en forma de triangulo equilátero, la cual cuenta con trece puestos por cada uno de sus lados, haciendo un total de treinta y nueve puestos para sus “invitadas de honor”. Sólo con la descripción anterior, a grandesrasgos, la obra tiene inmediatamente vinculación con la Última Cena (de la tradición iconográfica cristiana). Son innumerables las obras que citan, remiten o se asocian de un modo u otro con todo lo que ella conlleva. Pues bien, The Dinner Party fue la primera que problematizó el hecho de que sus trece asistentes fueran hombres.
Judy Chicago, invita a su mesa exclusivamente a mujeresdestacadas a lo largo de todos los tiempos. Ante la evidencia del sesgo androcéntrico que gobierna la historia y la historiografía tradicional, ante un constante dualismo ontológico que se arranca de Grecia y que concibe a los hombres como agentes activos, racionales y civilizados y a las mujeres como elementos reactivos, irracionales y naturales[1]. Las teorías feministas coinciden en la necesidad deponer fin a la dominación masculina y de abrir simultáneamente espacios discursivos de redefinición de la identidad de las mujeres, reivindicando y destacando los aportes del género femenino a partir de un profundo cuestionamiento al paradigma dominador-masculino que atraviesa la cultura occidental. En la instalación, las protagonistas indiscutidas son los mujeres, reales o imaginarias, de todos loslugares y de todos los tiempos, que al unísono alzan sus voces en contra del monopolio del poder masculino; mujeres que anhelan transmitir sus experiencias, mujeres que necesitan recuperar su cuerpo, mujeres que ya no se conforman con una existencia pasiva. Esta idea de enaltecer y santificar el rol femenino se ve reforzada por la poderosa simplicidad de la forma triangular de la mesa, que seasocia con la divinidad, confiriéndole un “manto” de sacralidad a la obra.
El hecho de que la artista haya elegido una mesa como objeto principal y articulador de la obra ( en desmedro de su primera idea que era, solamente, colgar los platos sobre la pared), se puede leer como una doble asociación, ya que por una parte, la mesa remite al aspecto religioso, remarcado por la indumentaria, ala cual nos referiremos a continuación. Asimismo se vincula al aspecto doméstico, conteniendo el rol femenino histórico, dando cuenta del trabajo “ no reconocido” de la mujer, pero de igual manera ensalzándolo, sacralizando y honrando estos quehaceres, llevándolos así, a un plano superior.
El sentido religioso está remarcado por la ropa que cubre la mesa. No podemos referirnos a ellacomo un simple mantel, ya que claramente existe una conexión con la iconografía eclesiástica. La mesa está cubierta por un manto blanco con una delicada línea dorada la cual se extiende a lo largo de sus bordes, pero son las tres esquinas las que nos brindan una visualidad aún mas clara, fuertemente ligada a un aspecto ceremonial, convirtiendo a esta gran mesa en un singular altar.
La obracuenta con tres corredores llamados “Millennium Runners”, simbolizados por la letra M ; la cual está incorporada en el elaborado diseño de las esquinas. Al darles este nombre, Judy Chicago, tenía la esperanza que para el cambio de milenio la discriminación femenina terminara por completo. Hoy en día, que nuestra mirada se sitúa a comienzos del siglo XXI, podemos asegurar que esta situación de...
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