Dios inmanente y trascendente
Al dialogar con mi yo, lo hago con Dios, y no porque Dios sea una proyección mía, comodijo Feurbach (repetido por Marx), sino por todo lo contrario, soy una proyección de Dios. Soy su proyección porque soy su creación. Como Creador es inmanente y trascedente a mí. Como inmanente estáen lo más recóndito de mi ser, allí se hace presente; como trascendente, traspasa el más allá. Su Inmanencia y Trascendencia se recogen en su Omnipresencia. Cuando habló con Él, lo hago con alguien dequien no puedo escapar, a donde voy, está, porque está dentro y fuera de mí. Utilizo el pronombre Él porque es una persona, con las propiedades de una persona. Y no es que le esté humanizando ohaciéndolo antropomórfico; al contrario, yo soy persona porque Él es persona. Siendo que es Creador, Inmanente, Trascendente y Omnipresente, entonces, es Omnisciente. Su Omnisciencia queda implícita. Lo sabey conoce todo.
Al dialogar con Él, lo hago con un Ser ante el cual, no hay nada que esconder, nada que decir, nada que aconsejar. Mejor es el silencio. Un silencio lleno de diálogo. Diálogo dondesoy arropado y sobrepasado, hasta el aniquilamiento, pero con un asomo de restitución por estar ante el único que conociéndome perfectamente no me extermina, sino que me lleva a la posición...
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