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Páginas: 14 (3265 palabras)
Publicado: 7 de septiembre de 2014
"Si te molesta el ruido de mi restaurante puedes vender tu casa, aguantarte o denunciarme"
María José Hernández vive en Cartagena y lleva 3 años denunciando ruidos. Ha denunciado a los dueños del restaurante que tiene en los bajos de su casa. También el Ayuntamiento de Cartagena por no multar. Ha puesto quejas al Defensor del Pueblo en Murcia y en Madrid.
TANIA COSTA. 16.02.2010
La primeravez se quejó de buen rollo. Escuchaba en su casa las conversaciones de los comensales del restaurante que tiene en los bajos de su casa. Creyó que bastaría con eso para que los dueños insonorizaran el local.
Pero el buen rollito se le acabó cuando el marido de la dueña del restaurante le espetó un día: «Si te molestan los ruidos puedes hacer tres cosas: vender tu casa, aguantarte o denunciarme.Hasta que no haya una sentencia firme no voy a insonorizar nada».
Eso fue en 2007. Desde entonces, María José Hernández no ha parado de enviar escritos al Ayuntamiento de Cartagena, al Defensor nacional del Pueblo y el mes pasado, al Defensor del Pueblo en Murcia.
En 2008, el Ayuntamiento le aseguró por carta que multaría al restaurante, donde el equipo de Gobierno de la alcaldesa Pilar Barreiro(PP) celebraba comidas oficiales, si no insonorizaba el local.
El Defensor nacional del Pueblo le contestó en julio de 2009, que el Ayuntamiento obligaría al restaurante Azafrán a cerrar una trampilla por la que se cuela el ruido. Ha sido en vano. Sigue igual, pese a que el restaurante ha sido remodelado recientemente.
La dueña del Azafrán es Lolo Galindo, ex asesora de Artes Plásticas de laalcaldesa de Cartagena hasta noviembre de 2009, cuando dimitió agobiada por acusaciones de trapicheos urbanísticos en zonas protegidas de la ciudad.
41 quejas al Defensor del Pueblo
Cuenta María José Hernández que en los últimos 3 años ha tenido que soportar dos o tres cenas multitudinarias a la semana. «Oigo todas las conversaciones, brindis, actuaciones en directo y cumpleaños felices hasta las 4de la madrugada», explica a 20minutos. Como ella, el año pasado otros 41 murcianos denunciaron contaminación por ruidos ante el Defensor del Pueblo. La semana pasada, el Supremo dictó una sentencia, que María José aplaude. El alto tribunal entiende el ruido como un delito de lesiones. De momento, esta vecina de Cartagena se ha querellado contra el Ayuntamiento por no cumplir las sanciones que hadictado en su caso.
Explicació del cas:
Una veïna de Cartagena, Maria José Hernández, denuncia, en el 2007, al restaurant dels baixos de casa seva, per sentir amb claredat tota conversació dels clients del local en qüestió.
En un primer moment aquesta queixa va ser transmesa de forma amistosa, però la resposta del propietari del local va ser la següent: «Si te molestan los ruidos puedeshacer tres cosas: vender tu casa, aguantarte o denunciarme. Hasta que no haya una sentencia firme no voy a insonorizar nada».
Al obtenir aquesta resposta, Hernández, va presentar una denúncia al ajuntament de Cartagena, al Defensor del Pueblo en Murcia, i el Defensor nacional del Pueblo. Al cap d’uns mesos, aquesta veïna, rep una carta en la qual l’administració local promet multar l’establimentsi aquest no s’insonoritzava.
Ja al 2009, rep una carta del Defensor nacional del Pueblo, que deia que l’ajuntament obligaria al restaurant Azafrán a tancar l’escotilla per la qual es filtraven els sorolls.
En total ja porta 41 queixes al Defensor nacional del Pueblo.
Opinions de Grup:
Des del nostre punt de vista creiem que el conflicte ha arribat a un punt bastant conflictiu.Per una banda tenim a una veïna que està en tot el dret a queixar-se a l’administració per els problemes que té amb els propietaris del restaurant dels baixos de casa seva, i per tant creiem que l’ajuntament en aquest cas està en l’obligació de buscar una possible solució.
Per una altre banda creiem que no s’han dut a terme les mesures pertinents i possibles per resoldre aquest conflicte, ja...
María José Hernández vive en Cartagena y lleva 3 años denunciando ruidos. Ha denunciado a los dueños del restaurante que tiene en los bajos de su casa. También el Ayuntamiento de Cartagena por no multar. Ha puesto quejas al Defensor del Pueblo en Murcia y en Madrid.
TANIA COSTA. 16.02.2010
La primeravez se quejó de buen rollo. Escuchaba en su casa las conversaciones de los comensales del restaurante que tiene en los bajos de su casa. Creyó que bastaría con eso para que los dueños insonorizaran el local.
Pero el buen rollito se le acabó cuando el marido de la dueña del restaurante le espetó un día: «Si te molestan los ruidos puedes hacer tres cosas: vender tu casa, aguantarte o denunciarme.Hasta que no haya una sentencia firme no voy a insonorizar nada».
Eso fue en 2007. Desde entonces, María José Hernández no ha parado de enviar escritos al Ayuntamiento de Cartagena, al Defensor nacional del Pueblo y el mes pasado, al Defensor del Pueblo en Murcia.
En 2008, el Ayuntamiento le aseguró por carta que multaría al restaurante, donde el equipo de Gobierno de la alcaldesa Pilar Barreiro(PP) celebraba comidas oficiales, si no insonorizaba el local.
El Defensor nacional del Pueblo le contestó en julio de 2009, que el Ayuntamiento obligaría al restaurante Azafrán a cerrar una trampilla por la que se cuela el ruido. Ha sido en vano. Sigue igual, pese a que el restaurante ha sido remodelado recientemente.
La dueña del Azafrán es Lolo Galindo, ex asesora de Artes Plásticas de laalcaldesa de Cartagena hasta noviembre de 2009, cuando dimitió agobiada por acusaciones de trapicheos urbanísticos en zonas protegidas de la ciudad.
41 quejas al Defensor del Pueblo
Cuenta María José Hernández que en los últimos 3 años ha tenido que soportar dos o tres cenas multitudinarias a la semana. «Oigo todas las conversaciones, brindis, actuaciones en directo y cumpleaños felices hasta las 4de la madrugada», explica a 20minutos. Como ella, el año pasado otros 41 murcianos denunciaron contaminación por ruidos ante el Defensor del Pueblo. La semana pasada, el Supremo dictó una sentencia, que María José aplaude. El alto tribunal entiende el ruido como un delito de lesiones. De momento, esta vecina de Cartagena se ha querellado contra el Ayuntamiento por no cumplir las sanciones que hadictado en su caso.
Explicació del cas:
Una veïna de Cartagena, Maria José Hernández, denuncia, en el 2007, al restaurant dels baixos de casa seva, per sentir amb claredat tota conversació dels clients del local en qüestió.
En un primer moment aquesta queixa va ser transmesa de forma amistosa, però la resposta del propietari del local va ser la següent: «Si te molestan los ruidos puedeshacer tres cosas: vender tu casa, aguantarte o denunciarme. Hasta que no haya una sentencia firme no voy a insonorizar nada».
Al obtenir aquesta resposta, Hernández, va presentar una denúncia al ajuntament de Cartagena, al Defensor del Pueblo en Murcia, i el Defensor nacional del Pueblo. Al cap d’uns mesos, aquesta veïna, rep una carta en la qual l’administració local promet multar l’establimentsi aquest no s’insonoritzava.
Ja al 2009, rep una carta del Defensor nacional del Pueblo, que deia que l’ajuntament obligaria al restaurant Azafrán a tancar l’escotilla per la qual es filtraven els sorolls.
En total ja porta 41 queixes al Defensor nacional del Pueblo.
Opinions de Grup:
Des del nostre punt de vista creiem que el conflicte ha arribat a un punt bastant conflictiu.Per una banda tenim a una veïna que està en tot el dret a queixar-se a l’administració per els problemes que té amb els propietaris del restaurant dels baixos de casa seva, i per tant creiem que l’ajuntament en aquest cas està en l’obligació de buscar una possible solució.
Per una altre banda creiem que no s’han dut a terme les mesures pertinents i possibles per resoldre aquest conflicte, ja...
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