directores de los 90'

GABRIEL CALDERÓN, MARIANELLA MORENA, IVÁN SOLARICH, HÉCTOR MANUEL VIDAL, CARLOS REHERMANN, ROBERTO SUÁREZ
La tercera es la del teatro espectacular y corresponde a los modelos que predominan en los noventa. Esta tendencia busca una especie de panóptico de los elementos teatrales considerados en su totalidad. El sentido lúdico suele prevalecer en estas representaciones a través de la utilizaciónde habilidades extremadas de los actores que serán a su vez, equilibristas, músicos u objetos. Pero quizás el rasgo más importante de estos grupos será el replanteo del uso del lenguaje verbal. En algunos caso llevándolo hasta el punto del aniquilamiento (Alberto Félix Alberto, de Teatro del Sur, en Buenos Aires), en otros fragmentando la discursividad para que dé cuenta de la fragmentaciónconcomitante de la realidad que se intenta representar.

Caraja-jí o el nuevo “Salón de los rechazados”.
En marzo de 1995 el Teatro Municipal General San Martín, de Buenos Aires realizó una convocatoria a dramaturgos jóvenes para proveer de textos a la incipiente Comedia Juvenil (2). La experiencia terminó abruptamente ya que los ocho aspirantes fueron “licenciados” en junio del mismo año. (3) Losrechazados, como el famoso grupo francés de los impresionistas resolvieron la situación reuniéndose bajo el nombre de Caraja-jí, que como comenta risueñamente uno de los integrantes del grupo, Alejandro Tantanián, significa “dramaturgo joven” en el idioma de una tribu centroamericana. El Centro Cultural Ricardo Rojas les dio cobijo y editó las obras de los ocho jóvenes que son el mencionadoTantanián (1966), Carmen Arrieta, (1964), Javier Daulte (1963), Alejandro Robino (1963), Alejandro Zingman (1966), Jorge Leytes (1962), Rafael Spregelburd (1970) e Ignacio Apolo (1969). El breve manifiesto del Caraja-jí dice: “Esto no es un manifiesto. Pero existe una intención grupal indefinida. Más aún: menos. Por lo tanto esto no sienta ningún precedente. Se trata tampoco de un primer paso. Lafinalidad CARAJA-JÍ es llenar vacío alguno. Aunque no es un punto. (punto)de llegada. Los integrantes de CARAJA-JÍ: Arrieta, Tantanian, Spregelburd, Robino, Daulte, Zingman, Leytes y Apolo, escriben esto.”(4)
Ellos mismos afirman que “El problema con el San Martín es que no éramos sólo ocho obras sino ocho cabezas que decían cosas poco convenientes”. Afirman también que “actualmente los modelos deproducción tradicionales están rotos y la teatralidad no es una sola cosa”. (5) El espacio tradicional del living de clase media, donde se desarrollaban casi todas las obras de la dramaturgia argentina, es arrasado por estos escritores, según una propuesta ya ensayada por Griselda Gambaro, Ricardo Monti, y algunos trabajos de Gorostiza y de Cossa.

La respuesta del público.
En los últimos años hetenido ocasión de presenciar la respuesta masiva de un público, aplastantemente juvenil, a las presentaciones que en espacios off Corrientes y a veces, ni siquiera teatrales, como la Biblioteca del Centro Cultural Ricardo Rojas, han realizado estos creadores. Una fascinación ritual rodea estas representaciones que atomizan las concepciones tradicionales del desenvolvimiento dramático con la noción deavance lineal de la trama. Por el contrario los contenidos y las psicologías se fragmentan pero apostando claramente a la entidad jerárquica del texto, que siempre alcanza un elevado nivel artístico. Según Rafael Spregelburd la “condición ritual del teatro es la única que no puede ser reemplazada”. El público participa de esta concepción con una concentración casi mística.
En ocasión delCongreso Internacional de Teatro de Buenos Aires del año 1997 pude comprobar que la actividad que convocó mayor expectativa y afluencia de gente fue la mesa redonda en la cual participaron los integrantes del Taller de Dramaturgia del Caraja-jí. Sin estrellatos mediáticos, sin revistas del corazón, estos creadores están metidos en el corazón cultural de la sociedad, confirmado lo que afirmaba el joven...