Discurso de musica
Alegre y triste al mismo tiempo; lúcido y nebuloso; accesible einabordable; lógico e ilógico, el ser humano es, en sí mismo, una paradoja llena de tensiones existenciales que se resuelven por la vía de la negociación. Los seres humanos somos inevitablemente ambivalentes.Más allá de la devaluación del concepto –debido a prácticas que lo fueron vaciando en su contenido primigenio–, la política es ante todo negociación. Y si la negociación está vaciada de sentido (muchomás la política, que debería ser concebida como el arte de construir colectivamente en función del bien común), no existe ninguna posibilidad de encontrar alternativas superadoras.
Entonces, frente alfracaso de la negociación y de la política, nuestra ambivalencia se convierte en una incongruencia que es obstáculo insalvable para pensar y para hacer. No hay negociación, sino enfrentamiento vano ypermanente. Y, definitivamente, no hay política.
La realidad política, donde deberían predominar los matices y los tonos, se torna inevitablemente monocromática, todo se ve en blanco y negro y seactúa en consecuencia. Pasa entre los dirigentes. Para unos, “todos” los que están “en el gobierno” son “malos” y hay que combatirlos por ese simple hecho. Desde la otra acera se sostiene que “todos”...
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