discurso del egrreso

Espacios que producen Alfredo Veiga-Néto
Traducción: Teresita E. Monkman
"Todo lenguaje es un alfabeto de símbolos cuyo ejercicio presupone un pasado que los interlocutores
comparten; ¿cómotransmitir a los otros el infinito Aleph, que mi temerosa memoria apenas abarca?"
(Borges, 1972, p. 133).
Introducción. El objetivo de este texto es discutir algunas relaciones entre el espacio y laeducación
escolarizada. Si la tradición pedagógica considera al espacio como el lugar en que suceden la práctica de
enseñar y de aprender en la institución escolar, y el escenario donde actúanprofesores, alumnos,
especialistas y administradores, mi objetivo, aquí, es diferente: es al mismo tiempo más humilde y más
ambicioso.
Humilde porque -como todos luego podrán ver- no voy a plantear lasevidencias y las prescripciones que son
comunes en la intersección entre arquitectura y pedagogía. Reconozco que el campo que se acostumbra
llamar de ingeniería y arquitectura escolar -con todas susramificaciones: técnicas de construcción de los
edificios, higiene de las edificaciones, normalizaciones, estudios del mobiliario, distribución del espacio, etc.,-
es importante y tiene sus utilidadesespecíficas. Pero, en cierta manera, lo que planteo en este texto noacarrea las huellas de la técnica y de la prescripción, ni tiene la pretensión de ser un discurso más verdadero
acerca de lasrelaciones entre el espacio y la escolarización moderna. Además, no estoy muy preocupado por
ser 6riginal, pero sí por contribuir a la divulgación, entre nosotros, de algunas cuestiones que me parecenimportantes y que están ligadas a nuestras prácticas educativas y sus rápidos cambios. También me interesa
problematizar y desnaturalizar algunas cuestiones que a mi juicio son contingentes pero que muya menudo
se consideran necesarias y que, por lo tanto, se aceptan con resignación.
Por otro lado, mi objetivo es ambicioso en la medida en que pretendo tejer algunas conexiones tal vez poco...