discurso

Queridos compañeros de promoción,
Señoras y señores:
Cerrad los ojos, abridlos, y estaréis en quinto de carrera: eso nos dijo a mis compañeros
y a mí el profesor Fernández de Bujan allá porOctubre de 2007 en el primer día de
clase de Derecho Romano. Y para mí es un grandísimo honor hablar en este día tan
especial, dirigiéndome a vosotros para deciros que sí, que Don Federico tenía razón:ninguno de nosotros podíamos pensar en ese momento que se haría tan breve una etapa
tan importante de nuestras vidas. Hemos pasado por cientos de exámenes, miles de
clases, trabajos, exposiciones,una eurocopa y hasta un mundial en medio de exámenes
mientras, ingenuos nosotros, creíamos que no nos distraerían en nuestro estudio.
Millones de anécdotas e infinitos recuerdos que no evitan que, aúnasi, se nos haya
hecho corto.
Esto no significa que quisiéramos quedarnos dos años más haciendo un master de
acceso a la abogacía, creo que eso ha quedado claro. Quiere decir que hemos cerrado unenriquecedor viaje que se mantendrá en nuestra memoria para el resto de nuestras vidas.
Un trayecto del que nos despedimos ahora, agradeciendo a todas esas personas que nos
han acompañado y con lasque lo hemos disfrutado.
Gracias a los padres por su incondicional apoyo y por su infinita paciencia. Al
profesorado por habernos sabido transmitir su pasión por el Derecho, por su dedicación
y sucercanía. Gracias igualmente al personal de administración y servicios de la
universidad sin el cual seguro que habernos licenciado hubiera sido mucho más
complicado: ¿qué hubiéramos hecho nosotrossin reprografía y su sobrada experiencia
al gestionar colas kilométricas para fotocopiar en el último minuto una hoja que luego
ni nos leíamos? ¿sin Rosa María Carrascosa y sus mails? ¿sin nuestrosamigos de
cafetería y su innata habilidad para servir a ritmo frenético 10 cafés por minuto mientras
piropean a las niñas durante el descanso? Esta claro que nada.
En resumen, gracias a ICADE y...