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EL ORIGEN DEL DIA DE MUERTOS
Pablo Sandoval Hern�ndez
Asesor de la Unidad Centro
Sin duda alguna la celebraci�n del d�a de muertos en M�xico, es una de las fiestas m�s importantes en muchas comunidades ind�genas y mestizas, sin embargo, no se trata de una fiesta con rasgos netamente prehisp�nicos, sino por el contrario, es la fusi�n de dos tradiciones: la ind�gena y la espa�ola. Es en s�, esuna mezcla de elementos culturales, misma que da por resultado una de las fiestas mexicanas que m�s trascendencia tiene, con un toque caracter�stico que la diferencia de cada comunidad.
Los d�as en que se lleva a cabo la celebraci�n no son para todos los pueblos el 1 y 2 de noviembre, como lo marca el calendario cat�lico; pues muchos grupos ind�genas comienzan la conmemoraci�n a sus familiaresfallecidos desde el 28 de octubre y la terminan el 3 de noviembre.
Como ya se mencion�, �sta festividad tiene dos ra�ces, la prehisp�nica y la espa�ola y para tener claro los elementos de una y otra cultura que a la fecha se presentan en las celebraciones hechas a los muertos en diversas regiones del pa�s, es conveniente hablar un poco de las tradiciones prehisp�nicas dedicadas al culto a losmuertos y de la influencia espa�ola que �stas recibieron a ra�z de la Conquista.
Antecedentes prehisp�nicos a este culto
Dentro de la cosmovisi�n que ten�an los antiguos nahuas de los diversos fen�menos naturales, vida y muerte eran temas de gran importancia; as�, en este sentido, la muerte era concebida como una transici�n entre la vida en la tierra y una nueva vida en el m�s all�, en compa��a delos Dioses.
�Para los antiguos mexicanos la oposici�n entre la muerte y la vida no era tan absoluta como para nosotros. Y a la inversa. La muerte no era el fin natural de la vida, sino fase de un ciclo infinito. Vida, muerte y resurrecci�n eran estadios de un proceso c�smico, que se repet�a insaciable.� (1)
En este contexto, se puede apreciar la idea de que el hombre era un intermediario entre elcielo y la tierra y el responsable de la conservaci�n del cosmos, cuya misi�n radicaba en perpetuar la creaci�n. �La vida no ten�a funci�n m�s alta que desembocar en la muerte, su contrario y complemento; y la muerte a su vez, no era un fin en s�; el hombre alimentaba con su muerte la voracidad de su vida insatisfecha...(2)
La creaci�n continua del universo depend�a del hombre, de la energ�avital que era liberada en sacrificios, penitencias, heridas y muertes; rituales que liberaban la sangre humana: �Agua Preciosa�, Chalchiuatl, sustento del sol.
Para Eduardo Matos el sacrificio era �... el pago que el hombre da a la deidad por el sacrificio que �sta realiz� en el tiempo m�tico para dar vida al hombre�. (3)
Octavio Paz refiere que �... El sacrificio pose�a un doble objeto: por unaparte, el hombre acced�a al proceso creador (pagando a los dioses simult�neamente, la deuda contra�da por la especie); por la otra, alimentaba la vida c�smica y la social, que se nutr�a de la primera.� (4)
Los lugares a donde iban los muertos eran diversos y no depend�an de c�mo hab�a sido su comportamiento en la tierra, sino del tipo de muerte que hab�an sufrido. Estos lugares eran la morada dediferentes deidades, de tal manera que las almas de los difuntos se incorporaban al acompa�amiento de los dioses, a los que pertenec�an dichas moradas.
Los lugares eran: el Tonatiuhichan, el Cihuatlampa, el Tlalocan, el Mictlan y el Xochatlapan o Tamoanchan. El Mictlan o lugar de los muertos era la morada de Mictlantecuhtli (el dios de los infiernos y la oscuridad) y de Mictecacihuatl. Este sitiose asociaba con el lado norte y contaba con una serie de inframundos dispuestos en nueve niveles; en el m�s bajo resid�an los dioses del infierno y los muertos. A este sitio iban los difuntos por muerte natural, ya sea por vejez o por enfermedades ordinarias. El difunto deb�a emprender su viaje por los nueve infiernos, pasando diferentes pruebas hasta alcanzar, despu�s de cuatro a�os, el descanso...