Divea

U.E. Bilingüe Cardenal Spellman
Karla Velásquez P.
3ro Bach “C”
Mi nombre es Aethel y soy uno de los pocos que quedan vivos de la raza de los semidioses Eligi, los verdaderos y originalespobladores de este planeta al que los inmundos humanos pusieron el nombre de Tierra. Ya no recuerdo cómo era antes nuestro hogar, me he desacostumbrado a usar mi propio nombre, he olvidado los rostros detodos quienes fueron mis compañeros… mis seres amados y he perdido casi por completo mi habilidad de identificar a los individuos de mi especie, si es que queda alguno. Somos tan confundibles con losseres humanos, que, prácticamente, es nuestra longevidad la única característica que nos distingue de ellos, o al menos así le parece a uno cuando ha vivido tantos siglos solo entre tan ruines criaturas.Han pasado ya más de 3 millones de años desde que creamos a los que ahora se hacen llamar hombres y casi 11 mil años desde que perdimos nuestra hegemonía y los humanos lograron convertirse en losdueños y destructores de nuestro planeta…
I
CREATIONEM
La Tierra, llamada Divea en el lenguaje nativo de los Eligi, fue un regalo de nuestro Dios Summus, junto con los otros asteroides y planetas deeste sistema solar, antes de que fuera derrocado de su condición divina por los dioses celosos que regían junto a Él el Universo. La envidia y odio que profesaban aquellos infértiles a Summus tenía suorigen en la idea misma de que ellos jamás pudieron, ni con todos los poderes imaginables, crear un solo pedazo de espacio del que germinara vida o que al menos esta vida durase un poco más que algunosaños, mientras que en el seno de nuestro Señor, se formaba un cuerpo celeste fresco, fuerte y lleno de creaturas dispuestas únicamente para amarlo y rendirle el culto que necesitan las deidades paramantenerse poderosas e inmortales. Frustrados por la creciente fuerza de nuestro Dios, el resto de deidades confabularon en su contra para que jamás pudiera llegar a desplazarlos y lo echaron en un...