Docencia

M
i trabajo como docente ha sido una gran experiencia, un proceso de aprendizaje del cual estoy segura que nunca terminará.
He de reconocer que en un principio me era difícil la relación conmis alumnos y por momentos pensé que “esto no era para mí”, pero con el tiempo he experimentado que esta labor es muy noble y que estar en contacto con los jóvenes me ha llenado de satisfacciones ybuenos momentos.
También con el tiempo he ido aprendiendo estrategias que han permitido mejorar mi enseñanza y que mis alumnos se interesen en mis clases y con ello, han presentado proyectos queellos mismos han construido con su creatividad y conocimiento, y eso para mí es una satisfacción muy grande.
A continuación les narraré un día de mi vida como docente:
Es padrísimo llegar a miinstitución por las mañanas después del ajetreo de dejar a mis hijos en su estancia infantil, y en ocasiones sin siquiera desayunarme una fruta y que mis alumnos al verme y saludarme con una sonrisa de “nopasa nada, todo irá bien”, mi semblante cambie. Después de entrar al aula y comenzar mi clase, ellos sean participativos y muestren su interés. Indicarles la práctica que deberán realizar en esaocasión en el laboratorio de cómputo los motiva a comenzar.
Aunque claro, he de reconocer que no siempre resulta como espero y que en ocasiones mi estrategia no resulta y se desinteresan pero he tratadode hacer cambios o aplicar dinámicas que les atraiga.
Ya en el centro de cómputo, la verdad es algo pesado pero divertido, porque varios quieren que los atienda por alguna duda que surge y con lapresión del tiempo por terminarse la clase a veces casi me “vuelvo loca”, jaja…, pero una vez concluida la clase y quedándome sola en el laboratorio, reflexiono y me doy cuenta que aunque terminéexhausta, me encanta mi trabajo, enseñarles mis conocimientos, mostrarles herramientas que les serán útiles en el presente y futuro me motiva a seguir adelante, seguir superándome, actualizarme, en fin,...