Documento Sin T Tulo
Narrador:
Había una vez hermosa niña llamada Caperucita Roja…
Madre: Caperucita, la abuela está enferma. Sé una buena niña y llévale esta canasta de comida.
Caperucita:
De acuerdo, mami.
Madre:
Aquí tienes un pastel, algo de pan y miel.
Caperucita:
Ya mismo la llevo, seguiré el sendero del bosque.
Madre: Sí. Por favor ve directo a casa de la Abuela y
¡no hables con ningún extraño!.
Narrador: Caperucita se desvía un poco del camino recogiendo flores para su Abuelita
cuando se encuentra con un Lobo…
Lobo: ¿Hacia dónde vas, pequeña?
Caperucita:
A visitar a mi Abuelita que está enferma. Vive al otro lado del bosque.
Lobo:
Deja que te acompañe. Este bosque es muy peligroso.
Caperucita: ¡Gracias! Es usted muy amable, Sr. Lobo, pero mi madre me ha dicho que no
hable con extraños.
Lobo:
Esta bien dulce niña, pero ten cuidado en tu camino.
Narrador:
El lobo se aleja entre los árboles y Caperucita continua recogiendo flores. Pero
mientras reúne suficientes para formar un hermoso ramo, el hábil Lobo corrió a la casa de la
abuela y golpeó a su puerta…
Abuelita: ¿Quién es?.
Lobo:
Soy Caperucita, te he traído comida.
Abuelita:
¡Ah! entra, querida. Estoy en cama.
Lobo:
Hola Abuelita. ¡¡¡¡Sorrrrrrpresa!!!!.
Abuelita:
¡Ohhhh! ¡¡¡¡Socorro!!!! ¡¡¡¡Socorro!!!!. Narrador: Pero el Lobo se devoró a la Abuelita en un instante, se vistió con sus ropas y se
metió en la cama. Caperucita Roja golpeó a la puerta…
Lobo:
¿Quién es?
Caperucita: Soy yo, tu nietecita.
Lobo:
Entra, querida.
Caperucita:
¡Hola! Ohhh, Abuelita, ¡¡qué ojos tan grandes tienes!!
Lobo:
Para verte mejor, tesoro.
Caperucita: Y Abuelita, ¡¡qué brazos tan largos tienes!!
Lobo:
Para abrazarte mejor, tesoro.
Caperucita:
Pero Abuelita, ¡¡qué dientes tan grandes tienes!!
Lobo:
¡¡Para COMERTE mejor, tesoro!!
Narrador: Y el ...
Regístrate para leer el documento completo.