DOLOR INFLAMACION

CON PUJANZA DE NOBLES CRUZADOS *
Palabras pronunciadas con motivo del homenaje de la Escuela Normal Superior de Caldas,
a la Escuela Normal Superior de Manizales, en el centenario de su fundación.
Auditorio “Carola Uribe” de la Escuela Normal Superior de Caldas.
7:00 p.m. Manizales, 13 de mayo de 2009

Por. Gustavo Arias Arteaga **

Agradezco a mi Rectora María Aracelly López Gil,

elhonor que me hace al

designarme, para que exprese, en nombre de mi actual comunidad educativa, la
Escuela Normal Superior de Caldas, a la Escuela Normal Superior de Manizales,
mi comunidad educativa de siempre, las palabras de reconocimiento por su labor
centenaria en beneficio de la ciudad, el departamento y la nación.

Quiero, a través de la construcción de sentido de una de susheráldicas, como es
el himno, exaltar la egregia labor de mi institución formadora, reconociendo, en
primer lugar, la vital creación de los maestros Bernardo Salazar en la letra y
Guillermo Ceballos en la música. He aquí una apretada rememoración de una
semana habitual de estudio normalista, que considera los variados enfoques
pedagógicos como riqueza fanal a lo que tanto en otrora, como hoy,denominamos, la formación integral:

Día Lunes:

Algo nerviosos y recién bañados esperábamos a nuestro maestro de Pedagogía.
Ya había pasado la izada de bandera en la que con frenético patriotismo
entonamos el “Oh gloria inmarcesible”. La clase se centró en el análisis del
hombre, en su plenitud antropológica que a fuerza de buscar lo trascendente
sobre lo inmanente, nos hacía sentir, a nosotros,los “mocosos de la época” los

seres más especiales de la creación, que un día fungiríamos de maestros, desde
la impronta del hombre modélico intemporal.
Se trataba de visualizar en cada uno de nosotros y en nuestros futuros “a-lumnos”
el paradigma eterno bajo cuyo canon, deviene la historia trágica del hombre en la
cual está decidida nuestra educación, producto de un ejercicio sistemáticoque
bordea las esencias de humanidad, que cultiva nuestra personalidad con
cualidades esmeráldicas y puras, con la esperanza de que el “hombre viejo” que
anida en nosotros muera, para posibilitar el advenimiento del “hombre nuevo”.

Nuestro maestro en su impecable presentación y con la fuerza de la palabra, nos
mostraba el predominio de la doxa sobre la episteme y era maravilloso sentirnosen “estado de conversión” respecto a la misión del hombre sin tiempo y sin
espacio.
Allí, aquél lunes, entendimos cómo el modelo tradicional es el “hechizo de la
totalidad”, cómo en una dinámica ideológica inesquivable ensayamos prácticas
incrustadas en la antropología y en la ontología de la formación humana, a través
de visiones metafísicas del hombre y de la realidad. Ya para finalizar, elmaestro
profirió: -de veras, quieren ser maestros? -Pues… desarrollen y muestren una
fuerza y un valor inquebrantables, que aumente cada día, que no cese, que por el
contrario se evidencie en la dignidad del joyero que toma lo más preciado y lo
resguarda en oro o plata; por ello les queda de tarea para mañana, leer
detenidamente a Platón y cómo éste narra a su maestro Sócrates, leer aAristóteles, a Santo Tomás, a Descartes y a Kant, por ahora.
Después del recreo, “nos tocaba Fundamentos”, recuerdo que la maestra de
carácter jovial, pero grave, manifestaba: -bueno… guarden todo... –La semana
pasada decíamos que la escuela estaba moribunda y les cuento hoy

que la

escuela se tiene que morir, es preciso que ustedes protagonicen otra forma de
educación en defensa de laslibertades, la escuela sólo reproduce el sistema

social imperante y la obediencia, es importante estar “sin Dios ni amo”, para hacer
del hombre realmente alguien libre. Y pasaban por nuestras mentes, todos
aquellos movimientos libertarios, seducidos por voces de fraternidad universal,
como el

feminismo, el ecologismo, el socialismo utópico, la lucha contra los

imperialismos, entre otros;...