dos amigas amibas
DOS AMIGAS AMIBAS
Gonzalo Celorio
Dos amibas vivían muy contentas en el estómago de Fausto, relativatlente
y nLlnca
cerca del píloro. Pasabanla vida cómodamente, comían muy bien
eran
trabajaban: eran lo que se llamaba unas parásitas. Se querían mucho,
buenas amigas, pero de vez e\ cuando entraban en fuertes discusiones
porquetenían temperamentos muy distintos y cada una aprovechaba su ocio
de rnanera diferente: una era muy pensativa y siempre se preguntaba qué
pasaba el
sucedería al día siguiente; la otra, encambio, era muy glotona, se
pensar
día comiendo y prefería vivir con gusto cada instante de su vida sin
en el mañana.
IJna vez,
a tu hora de la comida, la amiba pensativa le platicó asu
compañera lo que había estado pensando esa mañana:
dijo- el mundo que nos rodea, los ríos, las montañas,
1o mejor
los valles, los grandísimos canales, el cielo, no son tan grandescomo los
-le
-A
vemos; a lo mejor este mundo es muy pequeñito y todos los qr-re vivimos
aquí no Somos más que unos bichitos diminutos que estamos adentro de otro
bicho más grande,y ese otro bicho está en otro más grande y" '
La amiba glotona, que estaba comiéndose una lenteja gigantesca, le dijo
que eso no era posible y que consideraba una manera de perder eltiempo
pensar en esas tonterías.
Cuando Fausto terminó el plato de lentejas que estaba comiendo, se tomó
una medicina y las dos amibas desaparecieron.
Enrique, su gordísimo invitado, séquedaron platicando cle
bichito
sobremesa. Fausto decía que a lo mejor el hombre no era más que urn
quq no
diminuto que vivía adentro de otro bicho mas grande...Pero Enrique,
habíaacabado de comerse su inmenso plato de lentejas,lo intemrmpió:
Fausto
-Eso
y
no es posible
-le
dijo-, y creo que es una manera de perder el
tiempo pensal en esas tonterías...
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