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Escenarios diferentes
En vísperas de los 55 años del aquel 23 de enero, que dio término a la dictadura de 10 años del General Marcos Pérez Jiménez, vale preguntarse: ¿Se repite la historia? “El dilema democracia-dictadura está permanente en la historia del país, pero no podemos decir que el presente está repitiendo el pasado. Son períodos, personajes y escenarios diferentes”, analizael realizador Carlos Oteyza, de acuerdo con las investigaciones que hizo para llevar a cabo su reciente película “Tiempos de dictadura” –en la que plasma la época de Pérez Jiménez 1948-1958-, y cuyos algunos episodios lucen como un reflejo del contexto actual.
“Aunque los procesos históricos tienen diferencias y semejanzas. Hoy como ayer se acusan de ‘traidores’ a los que no están con elgobierno. Los que no estaban con Pérez Jiménez tenían que quedarse callados, sino llevados a prisión, torturas o al exilio. En aquella época había miedo de hablar de política, hoy no es todo el mundo, pero algunos que trabajan en instituciones gubernamentales tienen mucho miedo de decir que son oposición, por el temor de que te puedan botar. Entonces, también el miedo fue algo que existió en aquellostiempos y hoy sigue presente”, añade el cineasta.
Un caso sin precedentes
Se pudiera pensar que en tiempos de Pérez Jiménez o de Juan Vicente Gómez no existiese un poder judicial o legislativo independiente o autónomo, pero la actualidad no dista mucho de esas dictaduras. Hay la aplicación de una fuerza que mientras en aquellos regimenes era mucho más abierta y precisa, ahora se cuida más laforma”, fundamentó Blanco Muñoz. Citó que Gómez cambió la Constitución tantas veces le hizo falta para perpetuarse en el poder. Hasta hubo momentos en que colocaba otras personas en la Presidencia, pero tras bastidores la ocupaba era el mismo general.
Ahora, en estos 14 años de gobierno chavista, lo que se ha hecho es la “adecuación” a los intereses actuales, es decir, el poder ejecutivo ha idoadaptando los demás poderes a sus intereses, a través de un instrumento muy claro y específico: la inversión petrolera. Y no solo los poderes del Estado, también ha ajustado a su conveniencia a las Fuerzas Armadas agregándole un apéndice como la denominada “milicia revolucionaria” que nada tiene que ver con los principios del componente castrense ni con la Constitución del ’99, según explicó BlancoMuñoz.
Aunque algunos analistas han calificado a este mandato presidencial como una “dictadura post moderna”, el historiador dejó claro que es un régimen que se presenta como democrático, pero con rasgos muy definidos en el orden dictatorial. Y se remite a las evidencias de la alineación de poderes: el reciente dictamen del Tribunal Supremo de Justicia al declarar continuidad administrativa elejercicio del Presidente para avalar su ausencia, pudiendo regresar a juramentarse cuando y como quiera.
“Mayor incertidumbre dictatorial no hay en ninguna otra parte. Estamos en presencia de un caso sin precedentes en Latinoamérica y, cuidado sino en el orden mundial. Y está pasando en un país en el cual se dice prevalece una democracia participativa y protagónica, que no acaba de entendersecabalmente”.
Más paralelismo histórico...
Y si en aquellos períodos totalitarios prevalecía el silencio oficial, la diferencia es que en estos momentos impera la desinformación. “Hoy, el gobierno informa pero desinformando”, expresa Carlos Oteyza, quien rememora que cuando Pérez Jiménez no se decían las cosas que no se querían decir y hoy te dan una información pero sesgada”.
Citó el historiadorBlanco Muñoz que el desconocimiento en torno la salud del Presidente Chávez, recuerda el conocido caso de la muerte de Juan Vicente Gómez en 1935 en la que hubo gran incertidumbre, sobre todo, en Maracay donde estaba asentado el poder público, pues de un momento a otro el país estaba a la espera de la muerte de un hombre, cuya dictadura sólo podía terminar con su fallecimiento. Pero, fue...
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