ecologista de comunión

estudio teologico agustiniano de valladolid








Lumen gentium
Eclesiología de comunión













Pedro Francisco Casco Muñoz





La constitución dogmatica Lumen gentium del Concilio Vaticano II nos muestra la Iglesia a partir de la idea de ser ella el pueblo de Dios, parte manifestando su realidad sacramental, a la vez la presenta en su realidad de pueblode Dios, dejando de manifiesto la situación de la jerarquía en especial el episcopado, con lo que aclarara algunos de los postulados del concilio Vaticano I, y de los fieles laicos, para concluir con la vocación a la santidad, la realidad escatológica de la Iglesia.
Partiendo de estos postulados que la misma constitución ya citada menciona pretendemos hacer algunos apuntes sobre ella.
La realidadde la Iglesia como sacramento de salvación es muy evidente en la teología de nuestro tiempo, es sacramento en cuanto que es símbolo evidente de la realidad que nos espera, y a la vez es presencia viva de Cristo en el mundo; es sacramento de unión con Dios y con todo el genero humano, como nos dice Lumen gentium1.
La sacramentalidad de la Iglesia parte de su realidad de comunidad, dado que es“comunidad de fe, esperanza y caridad”1, como sacramento de unidad refleja el misterio del Verbo encarnado, que une en si lo humano y lo divino, de igual manera la iglesia presenta estos elemento, lo humano en cuanto a su jerarquía y lo divino en cuanto a los bienes celestiales con los que ha sido adornada2.
La realidad de sacramentalidad de la Iglesia es evidenciada en su ser pueblo de Dios, realidadque parte de el sacerdocio común de todo cristiano, que `por el bautismo participa del único sacerdocio de Cristo, pero es evidente la diferencia entre los sacerdotes ministeriales y los demás fieles, la diferencia entre ambos depende de la esencia y no del grado del sacerdocio de ambos, pues ambos sacerdocios son complementarios y como ya se ha dicho ambos participan, aunque de forma distinta,del único sacerdocio de Cristo, uno es quien ofrece la oblación y el otro participa de ella en la recepción de los sacramentos.3
Este pueblo de Dios no se circunscribe a una tierra única como antes había sucedido con el pueblo de Israel, sino que es un pueblo de realidad universal, haciendo de todos un solo pueblo como dice el Apóstol, y llevando así a la unidad de un solo cuerpo del que es cabezaCristo, por esto se reafirma la Iglesia como sacramento de Cristo manifestado ya en el numeral 1.
En Lumen gentium 14 – 16 se nos presentan tres grados de pertenecía al cuerpo de Cristo, con referencia a la pertenencia a la Iglesia visible: los cristianos católicos, los cristianos no católicos y lo no cristianos. Estas tres realidades expresan la pedagogía de Dios, cada una a su modo, de que atodos los hombres se salven, pues en todas ellas están las “semillas del Verbo”.
El capitulo primero concluye hablando de la “vocación-mandato” misionero de la Iglesia, la que en su naturaleza de sacramento de Cristo esta llamada a comunicar a todos los hombre de todos los tiempos la salvación de Dios, para que incorporados al pueblo de Dios, que es cuerpo de Cristo y templo del Espíritu, dengloria la Padre.4
Otra manifestación de la comunión eclesial es la colegialidad apostólica propuesta en el capítulo III de la Constitución, como hemos apuntado antes de esta manera el Concilio pretende aclarar y completar algunos de los postulados del anterior Concilio. Se mantiene la idea de la unión en este caso se presenta la unidad de los obispos, sucesores de los apóstoles queridos por Jesús,y estos unidos a Pedro, como garantía de la unidad de la Iglesia.
Este es un aporte importante del Concilio, es volver a ver la Iglesia como la comunión de Iglesias locales, particularidad que se había perdido por mucho tiempo, y por desgracia eran solo vistas las Iglesias locales como “tentáculos del poder de Roma”, esta aportación de volver a una realidad perdida en los discursos del...