Economia cualitativa de la formaciòn

PETER ALHEIT : Economía cualitativa de la formación
Fragmentos de la conversación de Peter Alheit con Manfred Weiss1 , aparecida en la revista Die, num. 3, 2004, pp. 26-29, con el título «Ninguna oportunidad para un cálculo estricto de beneficios. Economía de la formación y ciencia de la educación en diálogo».

La crítica a la teoría del capital humano en los años 60 y 70 procedió de dosorientaciones: Para la pedagogía tradicional de las ciencias humanas era un «notema». Para los escenarios entre la pedagogía y las ciencias sociales más influidos por la tería crítica o por las reflexiones marxistas tenía ella misma, como efectos económicos, la tendencia al capitalismo. Hoy tenemos que plantearnos lo económico. Usted, señor Weiss, denominaba variable marginal a la «escasez»; nosotrosla denominamos sencillamente «amenaza». En algunos ámbitos de la formación permanente se trata de supervivencia económica. Y las cambiantes condiciones organizativas han tenido cerca, de todos modos, una cierta sensibilidad para cálculos económicos. Muchas ofertas se basan desde hace mucho tiempo en una «combinación de financiación» forzado. [...] Soy presidente de la asociación «Trabajo libre depersonas mayores de Göttingen», que tiene dos pilares: un grupo de trabajo de personas mayores [ Alten-WG] de once mujeres entre 65 y 91 años, que se autoorganizan, y una oferta formativa intensiva, en la que también participan jóvenes. En una villa antigua de Göttingen, la formación crea un ambiente atractivo, que es percibido evidentemente por las personas mayores. Y se observa además una cosaque es de interés económico, porque la gente ingresa más tarde, cuatro o cinco años o quizás no tanto, en una residencia de ancianos. El beneficio económico para el Estado –si se pudiera generalizar tal modelo– sería del orden de miles de millones de euros. Por ello, debemos de tomar muy en serio desde el punto de vista económico tales formas blandas de organización de la formación, de la formaciónpermanente, de la formación de personas mayores, etc. [...]

Nosotros invertimos proporcionalmente mucho en comparación con otros países en los itinerarios de la formación permanente, pero después que hayan tenido lugar determinados procesos de selección y, con ello, se hayan producido ciertas desigualdades sociales. Es decir, estas desigualdades se han hecho más profundas, como demuestra elinforme PISA. Invertimos relativamente menos en los procesos de formación inicial. Los padres tienen que cubrir costos considerables para la atención
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Economísta de la formación en el Deutschen Institut für Internationale Pädagogische Forschung [Instituto para la Investigación Pedagógica Internacional] (DIPF) de Francfort.

en las escuelas infantiles y las escuelas infantiles mismas no tienenuna idea clara sobre que son realmente compatibles la formación y la educación y que se relacionan con el sistema escolar. ¿No tendríamos que considerar también, junto con el volumen de la inversión que hace la sociedad en formación, la estructura interna de esta inversión y las considerables consecuencias de esta estructura en términos de política formativa? [...] En el sentido de una pronósticotécnico, se podría decir cuánto dinero tendríamos que redistribuir si quisiéramos invertirlo de manera beneficiosa. El nivel preescolar tendría que ser ofrecido y organizado sin costo. Y la escuela primaria y la secundaria obligatoria deberían de estar mucho mejor equipadas. A los bachilleratos deberían, de manera análoga, retirarles las ventajas actuales. Incluso se tendrían que apartar de lasescuelas superiores libres y de la libertad de derechos los actuales mecanismos de exclusión. Entre los estudiantes acogidos a las ayudas ministeriales [SchülerBAFÖG], entre 1971 y 1983 se había incrementado considerablemente el número de niños trabajadores en las escuelas de formación continua. De ello se deducen consecuencias. Por tanto, habría indicadores plenamente efectivos. [...] En la...