economia
Estos países, entre los que se cuenta Ecuador, estarían atrapados en la lógica perversa de la maldición de la abundancia”1. ¿Será que son países pobres, porque son ricos en recursos naturales?, pregunta invitando al debate Jürgen Schuldt [1].
ECUADOREN LA TRAMPA PETROLERA
En los años setenta del siglo XX, como pocas veces en su historia, el Ecuador entró de lleno en el mercado mundial. No porque se hubiera producido un cambio cualitativo en su condición de país exportador de materias primas (banano, cacao, café, etc.) sino más bien por el volumen de sus exportaciones petroleras, que superó largamente los niveles de los anterioresproductos primarios que caracterizaron a la economía ecuatoriana. La explotación de crudo constituyó el revitalizador de la economía, otorgándole a Ecuador la imagen de “nuevo rico”.
Entonces el país se volvió atractivo para los bancos extranjeros. Antes, la economía ecuatoriana había tenido una importancia relativamente marginal para los capitales foráneos. Así las cosas, el Ecuador petroleroconsiguió los créditos que no había recibido el Ecuador bananero y mucho menos el cacaotero. Pero la riqueza petrolera no fue el único detonante de la carrera de endeudamiento externo. Hay que destacar que el masivo flujo de recursos financieros hacia los países subdesarrollados en los años setenta del siglo XX se debió, sobre todo, a la existencia de importantes volúmenes de recursos financieros en elmercado mundial.
Esta situación de abundancia relativa de recursos financieros permitió un manejo político de cierta tolerancia en medio de un régimen dictatorial. El petróleo facilitó la postergación de algunos conflictos estructurales. El Ecuador mantuvo el carácter de una economía extractivista [2]. Tampoco se transformó la estructura de la propiedad, caracterizada por niveles de elevadaconcentración. Esta bonanza motivada por el petróleo, que apareció en forma masiva y relativamente inesperada, se acumuló sobre las mismas estructuras anteriores y reprodujo, a una escala mayor, gran parte de las antiguas tensiones. Así, en poco tiempo se cristalizó en “el mito del desarrollo” [3].
Mientras duró el auge petrolero, el estado se constituyó, por primera vez, en el actor principaldel manejo de la economía. El estado “petrolero” (más allá de las intenciones reformistas de la dictadura militar) fue, una vez más, expresión del poder de los grupos dominantes.
Hay que mencionar, también, las distorsiones provocadas por una mal entendida y peor aplicada estrategia de industrialización vía sustitución de importaciones, cuya aplicación (errada e incluso incompleta) terminó porconsolidar las prácticas rentistas de amplios segmentos empresariales.
Más tarde, cuando menguó la bonanza petrolera, empezó la larga crisis de la deuda externa. Y desde entonces, empezó una marcha de ajustes y desajustes interminables. El petróleo, que en un momento dado fue la palanca para impulsar algunos procesos de industrialización, a pesar de la caída de su cotización, se transformó enuna herramienta fundamental para tratar de pagar la enorme deuda externa acumulada en la época de la bonanza petrolera.
Posteriormente, con una nueva caída de los precios del petróleo y como consecuencia de otros factores exógenos y endógenos, Ecuador concluyó el siglo XX con una de las mayores crisis de su historia. Entonces, incluso como consecuencia de la imposición irresponsable de la...
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