Educacion Social

T.7.- La experiencia escolar desde las personas que aprenden: una mirada a los jóvenes y a los centros escolares.

Los jóvenes y los centros escolares.

- Una mirada más detenida a los jóvenes:

Hay una herencia de percepciones públicas de la infancia que ha hecho difícil que las personas tomen en serio la idea de animar a los jóvenes a que hagan su aportación a los debates sobreaquello que les afecta, tanto dentro como fuera del centro escolar.
Hay ideas generalizadas de que los niños son “seres incompletos, vulnerables, que progresan con la ayuda adulta por etapas necesarias para convertirlos en adultos maduros”; nos preocupamos por “lo que serán” y no por lo que “son”, esta percepción nos ha llevado a subestimar sus capacidades presentes.

En determinados mediossociopolíticos, se ha tendido a pasar por alto a los niños, en cuanto grupo social, y se ha subestimado su capacidad para desarrollar una conducta autónoma y responsable.
La generación Y es la primera que ha experimentado, desde su infancia, la “informatización de la sociedad”, con su consecuente continúo bombardeo de información. Quizás esta generación tenga que afrontar la intensificación de la crisisdel empleo, el aumento de la distancia entre ricos y pobres y el incremento de los riesgos medioambientales. Todos estos problemas destacan en los ámbitos de decisión que pueden afectar la vida de los jóvenes que están ahora estudiando, y tenemos que preguntarnos si los planes prioritarios del centro escolar los prepara para afrontar con éxito estos problemas.

- Una mirada más detenida loscentros escolares:

A pesar de las sucesivas oleadas de reforma curricular, los centros escolares no han cambiado tanto como pudiésemos haber previsto. Sigue siendo un entorno muy disciplinado con respecto al tiempo y a las actividades que se realizan.
Dedicar más atención a la participación de los alumnos puede promover el progreso del aprendizaje. Por tanto, una mayor participación de losalumnos no tiene por qué estar en oposición a los planes del gobierno relativos a los niveles y fomenta explícitamente los nuevos planes relacionados con la ciudadanía.
Jamieson y Wikeley señalan que “los centros escolares tienen que descubrir de forma sistemática todo cuanto puedan acerca de los intereses y preocupaciones de sus jóvenes para diseñar los planes de escolarización” y hacen hincapié enque el tipo de flexibilidad y autonomía profesionales que es bueno para los alumnos también lo es para los docentes.

Si las nuevas premisas acerca del status de loa alumnos y las formas óptimas de trabajo de las personas pueden relejarse en los espacios de los nuevos centros, se producirá con mayor facilidad el tipo de cambios que nos parecen interesantes. Por desgracia, la realidad es que lamayoría de los alumnos sigue educándose en edificios en los que hay que neutralizar activamente los mensajes de la arquitectura.



No subestimemos a los alumnos.

Merece la pena buscar formas de reconocer la madurez creciente y el ascenso del status de los jóvenes a medida que van pasando por los cursos de primaria y secundaria, aunque no siempre esté presente la combinación correcta detareas y confianza. Por supuesto, alguien puede decir que la adopción de roles adicionales puede bloquear el cumplimiento de la principal responsabilidad del os alumnos, que es aprender, pero, a modo de contraargumento, creemos que es más probable que los jóvenes de hoy se comprometan a aprender dentro de organizaciones que reconozcan sus capacidades.
¿Qué tipo de roles y responsabilidades están adisposición de los jóvenes en los centros escolares actuales? Las pruebas procedentes de una serie de estudios de centros indican que los limitados roles “reguladores” tradicionales (monitores o encargados) están dando paso a un conjunto más amplio de papeles “sociales/institucionales” y “pedagógicos”. A medida que se reconoce la capacidad de los alumnos, aumenta la gama.

- Ejemplo de roles...