Educacion

Jorge Larrain, nos presenta algunos rasgos de las transformaciones en la cultura de Chile, a través de un análisis de los principales elementos que han caracterizado la formación y re-creación de las identidades en nuestra sociedad, en un recorrido histórico. Desde una perspectiva colectiva a la individual, a partir de los cambios que se han suscitado a través de la historia.
Las relacioneshumanas en nuestro país han sido normadas por las elites, en la esfera política y económica, mientras que la gran masa se relaciona desde pactos sociales. Desde esa perspectiva, es necesario pensar en la influencia que tienen las relaciones sociales en la educación y cómo las nuevas formas culturales las afectan.
Larrain, nos dice que “La identidad se forma en función de las opiniones yexpectativas de otras personas que son significativas para ella” (Larraín, 2001, p. 247), por lo tanto las expectativas y las opiniones, tienen gran importancia en esta sociedad, sobretodo en un ambiente de formación como es la de los jóvenes en sus escuelas. Ellos desarrollan lazos muy significativos con sus pares y profesores, por lo que el reflejo de la sociedad -de consumo- en la que vivimos, se hacetrascendental dentro y fuera de la escuela.
Sin embargo, la identidad que se ha transformado, no ha sido espontánea ni autodidacta. En esa dirección, el autor propone una transformación que surge del cambio, negativo a mi parecer, en las relaciones con las diversas instituciones y formas, también decisiones, de gobierno que entregan rasgos a las identidades desde su ubicación, la del sujeto, enla sociedad. Dicho cambio, legado de la dictadura, se manifiesta completamente desde la década de los 90s, momento en el cual que las relaciones sociales, culturales, políticas y sobretodo económicas toman un nuevo rumbo.
A la importante transformación mencionada anteriormente, se suman la relaciones sociales de clientelismo, que se mantienen desde la Colonia hasta nuestros días (aunquemodificadas a lo largo de nuestra historia), la que han mantenido a la sociedad sumergida en una división social entre los “que están arriba” y “los que están abajo”, provocando en estos últimos un sentimiento de decepción –o fatalismo. Dicho sentimiento, se consuma al vivir en una situación de desigualdad. Esta situación es reflejada completamente en las escuelas, donde asisten jóvenes y niños de escasos–y no tan escasos- recursos, puesto que las posibilidades de ser aceptados las impone la sociedad -de consumo-, sin importar la condición social y económica en que esté inserto el estudiante, por lo que se reproduce la desigualdad y no se le permite a gran parte de la sociedad proyectarse en equidad.
Otro aspecto fundamental que ha se ha modificado en la identidad es la despolitización a partirde los procesos políticos vividos desde el golpe de Estado de 1973, el cual produjo una degeneración en la participación ciudadana, que se acompañó del aumento de los medios de comunicación que tienen como resultado hoy en día, una practica privada de democracia, que se ensimisma y se practica desde el hogar. Sin embargo, la educación materializada en las escuelas, tiene como una de sus funcionesmotivar la participación, puesto que ellas, las escuelas, cuentan con las armas y herramientas para desarrollarla. Las nuevas generaciones criadas bajo paradigmas eclécticos, buscan o más bien merecen, formas de participación acorde a las redes de información y comunicación actual, sin embargo este rasgo que se vuelve parte de esta nueva identidad, surge de los progresos técnicos modernos -quedeben se incluidos por la educación- y no por la realidad social de inequidad que aun se vive en nuestro país.
Como conclusión, la identidad chilena, se construye desde los procesos que acontecen a la sociedad dependiendo del contexto y sus antecedentes, los cuales cada vez más incorporan nuevos elementos, actualmente elementos globalizadores.

Por otro lado, Tedesco, nos dice que en la...