Educación Y Democracias De Cara Al Siglo Xx1

PALABRAS PRONUNCIADAS EN EL ATENEO AMANTES DE LA LUZ, EN LA PUESTA ES CIRCULACIÓN DE LA OBRA: EDUCACIÓN Y DEMOCRACIA DE CARA AL SIGLO XX1, ESCRITA POR EL PROFESOR LUIS DE LEÓN, EN JUNIO DEL AÑO 2000.

Por

Humberto R. Méndez B.


Buenas noches, que sean mis primeras palabras de agradecimiento a las personas que han organizado este doble evento, en esta culta e hidalga ciudad de santiago.Primero por la puesta en circulación de la obra del profesor Luís de León: Democracia y Desarrollo de Cara al Siglo XX1; y segundo, por presentarse en esta ciudad por primera vez, un documenta sobre el profesor Juan Emilio Bosch y Gaviño, realizado por el periodista Gerardino González, en el cual se presenta a don Juan en la trayectoria de un maestro eterno.

Ambos eventos, debemos confesar, sonya de por sí, actos solemnes y festivos; festivos porque son un encuentro cultural, en el cual se integran y amalgaman todos los sectores sociales; y son solemnes porque se reúnen en este salón.

Siempre que en nuestro país se pone a circular un libro, se trae a colación la frase feliz de don Américo Lugo, en la cual, nuestro gran civilista expresa, que la publicación de un libro debe sercelebrada como el nacimiento de un príncipe…pero digo más, porque no celebrarlo como el advenimiento de una democracia, donde se puede compartir y departir con los sabios, genios, artistas e intelectuales en franca camaradería y en pie de igualdad. Y eso es lo que haremos en esta noche, compartir brevemente sobre Educación y Democracia; y de ya avanzarle a ustedes que es una obra fresca y lozana,compuesta por capítulos breves y concisos; obra que está creada con freses lapidarias e ígneas, que estamos seguros se ha de mantener como los árboles de hojas perennes, que ostenta su follaje en lo más crudo del invierno.

Quienes hayan leído a Quevedo y a Gracián, apreciaran la brevedad de los capítulos y lo apodíctico de sus sentencias, donde el estilo es cablegráfico, sin ambages, ripios, nirebuscado. En esta obra, el titulo encierra menos de lo que el lector puede esperar, porque en este siglo XX1, educar significa: un política ambiental, es la realización del desarrollo humano, con unos objetivos y criterios definidos, ya que los conocimientos son riquezas a la que todos tenemos absceso a través del cable, la parábola, el satélite y la Internet, así como por la fibra óptica.

Comolo explica el profesor de León, educar es desarrollar al ser humano en sus tres dimensiones: mente, mano y corazón; que es como si dijéramos: en lo afectivo, cognoscitivo y motora. Y es que los educadores son”…héroes verdaderos de nuestra vida moderna”, que dice Pedro Henríquez Ureña.

En la tercera parte de la obra, los nombres luminosos de América brindan rayos de luz al lector. Cuando noshabla del Prof. Bosch, encontramos que la cultura es educación, y la educación es equivalente a la política, no existiendo entre educación y política una diferencia que a penas es formal; ya que toda política es educación. Pero en las secciones dedicadas a: Hostos, Martí, Bolívar, Duarte, Bosch y a Pedro Henríquez, es cuando el profesor de León abandona la cátedra para tornarse al altar, y sesublimiza en la santa advocación de esos manes tutelares, y como si fuese una laica transfiguración, invoca los más puros y sublimes, a los santos y apóstoles del cielo secular, dejando en esas breves paginas antológicas, el recuerdo de aquellos modeladores de caracteres, forjadores de conciencias y elevadores de espíritus.

Así como los Procederes de Jesé Dubeaux deben ser un catecismo para elmaestro dominicano, o con la misma insistencia con que los discípulos de Hostos, les pedían a éste que urgía publicara su Moral Social, este libro, que hoy ponemos en circulación, viene a llenar un vació, y ha de satisfacer una necesidad, ya que es un compromiso con el pueblo dominicano, una exigencia que debe ser hecha realidad, una profesión de fe, una declaración de principios, un ideario que...