EG CAZARES
JUAN DIEGO SÁNCHEZ GONZÁLEZ
EVANGELI GAUDIUM: LA ALEGRIA DEL EVANGELIO
INTRODUCCIÓN
La alegría del Evangelio llena el corazón y la vida entera de los que se encuentran con Jesús. Quienes se dejan salvar por Él son liberados del pecado, de la tristeza, del vacío interior, del aislamiento. “Con Jesucristo siempre nace y renace la alegría”. El granriesgo del mundo actual, con su múltiple y abrumadora oferta de consumo, es una tristeza individualista que brota del corazón cómodo y avaro, de la búsqueda enfermiza de placeres superficiales, de la conciencia aislada.
El Evangelio, donde deslumbra gloriosa la Cruz de Cristo, invita insistentemente a la alegría en algunas citas se menciona la alegría 1,28; 1,41; 1,47; Jn 3,29; Lc 10,21; Jn 15,11).Quien “ha acogido ese amor que le devuelve el sentido de la vida, ¿cómo puede contener el deseo de comunicarlo a otros? Pues la iglesia nos convoca a tener dinamismo de la realización personal.
La evangelización convoca a todos y se realiza fundamentalmente en tres ámbitos: la pastoral ordinaria, destinada a encender los corazones de los fieles que regularmente frecuentan la comunidad y a los queconservan una fe católica, aunque no participen frecuentemente del culto; el ámbito de « las personas bautizadas que no viven las exigencias del Bautismo »; y quienes no conocen a Jesucristo o siempre lo han rechazado. Todos tienen el derecho de recibir el Evangelio.
CAPÍTULO PRIMERO
LA TRANSFORMACIÓN MISIONERA DE LA IGLESIA
Es una propuesta de reforma misionera de toda la iglesia.
Laevangelización obedece al mandato misionero de Jesús. La Iglesia en salida es la comunidad de discípulos misioneros, que se involucran, que acompañan, que fructifican y festejan. Él buscar a los lejanos y excluidos, para brindar misericordia. Como consecuencia, la Iglesia hace chicas las distancias, se abaja hasta la humillación si es necesario. Luego, acompaña a la humanidad en todos sus procesos, pormás duros y prolongados que sean.
La parroquia… puede tomar formas muy diversas que requieren la docilidad y la creatividad misionera del Pastor y de la comunidad. Esto supone que realmente esté en contacto con los hogares y con la vida del pueblo. La parroquia es presencia eclesial en el territorio. Las demás instituciones eclesiales, comunidades de base y pequeñas comunidades, movimientos y otrasformas de asociación, son una riqueza de la Iglesia que el Espíritu suscita para evangelizar.
El Obispo debe favorecer los mecanismos de participación que propone el Código de Derecho Canónico y otras, “con el deseo de escuchar a todos y no sólo a algunos que le acaricien los oídos. Una excesiva centralización… complica la vida de la Iglesia y su dinámica misionera.
La invitación de esta encíclicaes que seamos audaces y creativos en esta tarea de repensar los objetivos, las estructuras, el estilo y los métodos evangelizadores. Lo importante es no caminar solos, contar siempre con los hermanos y especialmente con la guía de los obispos, en un sabio y realista discernimiento pastora. Una pastoral en clave misionera no se obsesiona por la transmisión desarticulada de una multitud dedoctrinas que se intenta imponer a fuerza de insistencia. Cuando se asume un objetivo pastoral y un estilo misionero, que realmente llegue a todos sin excepciones ni exclusiones, el anuncio se concentra en lo esencial, que es lo más grande, lo más atractivo y al mismo tiempo lo más necesario.
Todas las verdades reveladas proceden de la misma fuente divina y son creídas con la misma fe, pero algunas deellas son más importantes por expresar más directamente el corazón del Evangelio, cuyo núcleo fundamental es la belleza del amor salvífico de Dios manifestado en Jesucristo muerto y resucitado.
La imputabilidad y la responsabilidad de una acción pueden quedar disminuidas e incluso suprimidas a causa de la ignorancia, la inadvertencia, la violencia, el temor, los hábitos, los afectos desordenados y...
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