El Agua
Amigo:
Partamos por lo primero. Felicitaciones. Hoy te levantaste siendo el campeón de un torneo continental, título que solo viene a confirmar otro hecho indiscutible: hoyeres hincha del mejor equipo de este puñado de tierra.
Te mentiría si te digo que me gustó el resultado, pero desde la goleada en Brasil hasta ahora he tenido el tiempo suficiente como para llegar ala completa aceptación. Tú, que preferiste ser precavido y no cantar victoria antes de tiempo, recién ahora le estás dando rienda suelta a toda esa alegría acumulada, esperando el momento demanifestarse. Es tu momento. Disfrútalo a concho porque parte de la magia del fútbol es que nada dura para siempre.
Por la misma razón, porque ahora solo quieres celebrar un triunfo tan bonito, sé que noestás para un análisis muy frío. Pero cuando lo estés, cuando vuelvas a estarlo, voy a ser uno de los que van a agradecer el cambio en tus argumentos.
Es cierto que por un tiempo te vas a seguircomportando como el equivalente deportivo al nuevo rico. Un roto con plata del fútbol. Soy de los que están dispuestos a pagar ese precio con tal de que salgas de la madriguera en la que llevas tanto tiempoescondido, y que ahora por fin puedas tener opiniones futbolísticas que no provengan desde el fondo de una nube de humo.
Respóndeme algo. Esta noche mágica, la cima más alta de toda tu historia, ¿lavas a olvidar en veinte años más? Supongo que no, porque eso sería darle la espalda a lo que es preciado. Entonces, ¿ahora sí vas a renunciar a la tonterita de decirnos que “vivimos de los recuerdos”?Porque cuando apilabas décadas de fracasos nunca dejaste de aferrarte a la memoria del ballet azul (refiriéndote al equipo chileno, no al Millonarios colombiano de Alfredo Di Stefano de donde alguienfotocopió el nombre).
Ahora que ganaste, ¿vas a aceptar que cualquier hincha de otro equipo te diga que ellos valen más que tú porque alientan a su equipo sin haber levantado una copa?, ¿que eso...
Regístrate para leer el documento completo.