El Ambiente Entra Al Museo O El Museo Se Integra Enel Ambiente

¿El Ambiente entra al Museo o el Museo se integra en el Ambiente?
(Algunos casos del Caribe Insular)

Coral Delgado
Universidad Simón Bolívar


Como se sabe, el Museo, con características bastanteparecidas a las de hoy en día, es una institución creada en Europa hacia finales del siglo XVIII, y exportada al resto del mundo casi sin ninguna modificación. Sin embargo, hacia la segunda mitad del siglo XX, y a pesar de la reticencia de muchos museólogos, apareció la idea de “Ecomuseos” y la intención de que éstos se insertaran (y fueran el reflejo) de ambientes específicos.


Pero notodo fue como sus ideólogos. Los ecomuseos tuvieron su auge y también sus dificultades. La idea, además de novedosa desde el punto de vista museístico, implicaba una relación estrecha con el desarrollo de comunidades concretas.


Hugues de Varine Boham, quien fue el principal impulsador de los ecomuseos, sobre todo, cuando fue Secretario General del ICOM, proponía dos vertientes para lamisma noción. Por un lado, ecomuseos relacionados con el ambiente físico-natural (parques nacionales, jardines botánicos, zoológicos, acuarios, reservas naturales) y ecomuseos relacionados con la formación y expresión de comunidades concretas.


Los años 70 del siglo XX vieron el “boom” de ambas vertientes, sobre todo, en países como Francia, Bélgica, Canadá, los Estados Unidos. Yanteriormente, pero sin mucho ruido, los países nórdicos.


Pero, a pesar del intento por salir del encierro y de la asociación con “viejo, polvoriento y aburrido”, los ecomuseos no lograron hacer la revolución necesaria para representar una fuerza “impulsadora” de cambios en las funciones del museo ni en su rol en las transformaciones sociales.


Hay que reconocerles, sin embargo elesfuerzo realizado y los logros que muchos de ellos han tenido desde su creación.


Apartando los museos de Historia Natural o de Ciencias Naturales, los cuales no esperaron la llegada de los problemas ambientales para tratar la naturaleza (incluso si lo hacían a su manera), y los ecomuseos de la vertiente ecológica, el Museo, como institución, le ha dado poca cabida y le ha dedicado pocoespacio a lo concerniente al Ambiente físico-natural, al “mundo verde”, a lo ecológico. Muchos se han contentado con hacer exposiciones que tratan problemas de actualidad como la contaminación, la desaparición de especies, la destrucción de ecosistemas, la lluvia ácida, el recalentamiento del planeta, la extensión de las zonas desérticas, el reciclaje de la basura, el agujero de la capa de ozono ola dificultad de obtener agua potable, entre otros, sin embargo, tales exposiciones no representan ningún impacto para la sociedad. Y, en todo caso, cabe la pregunta de si la iniciativa de dichas exposiciones ha venido del museo o responde a temas que están en el tapete de las políticas públicas o de los media y que, en cierta forma, están de moda.


El museo no ha tenido la costumbrede tratar temas que pertenecen al “presente”. Él se ha mantenido como representante del pasado, le cuesta mirar los problemas que están a su alrededor y asumir posición frente a ellos.


Cuando se habla en círculos políticos de problemas ecológicos o ambientales, no se menciona el papel que podrían jugar el Museo y las exposiciones frente a esos problemas; tal es su escasa significación.Las cosas serias al respecto parecen estar fuera del Museo.


No obstante, aunque la sociedad no lo fuerce ya sea porque no tiene medios de presionarlo o porque no tiene conciencia de la gravedad del problema, el museo mismo debería tomar la iniciativa de examinar la concepción que hasta el presente tiene de su misión y, rediseñar el papel que le tocaría jugar frente a esos problemas;...