EL AMOR EN LA PRIMERA INFANCIA DE LOS MONOS
La primera muestra de afecto del bebé humano es para su madre. Nadie ha investigado sobre ello porqué parece un tema muy natural pero un grupo depsiquiatras infantiles pusieron en duda muchas explicaciones y por eso decidieron hacer un experimento. Lo hicieron en el laboratorio de Primates de la Universidad de Wisconsin, con crías de monos Rhesus.
Losbebés monos tienen una coordinación mejor al nacer que los bebés humanos, maduran mucho más rápidamente pero ambos bebés siguen el mismo modelo general de desarrollo.
Empezaron con la utilización dedos madres-monos simuladas. Una de ellas era con forma desnuda cilíndrica de alambre y la otra estaba acolchada con tela de felpa. Colocaron 8 monos, 4 con cada madre. Los registros mostraron queambos grupos pasaron más tiempo saltando y trepando por la madre cubierta de felpa.
A medida que iban creciendo, aquellos de la madre de alambre, no pasaban con ella más tiempo que el que requería sualimentación. Estos resultados atestiguan la importancia que supone el contacto corporal y el bienestar inmediato.
La siguiente fase consistía en exponer a los bebés monos a una situación de miedo, losdos grupos buscaron protección en la madre de felpa. Cuando llevamos a un niño a un sitio extraño, suele sentirse feliz mientras que la madre está a su lado.
Las pruebas de control con monos quedesde su nacimiento habían conocido sólo a la madre de alambre, demostraron que no tenían ningún afecto alguno en ella y que no se sentían aliviados con su presencia, por eso acudían a la madre de felpaen situación de miedo.
Más tarde, comparando la responsividad de los monos a dos madres de felpa, una fija y otra con balanceo, todos prefirieron a la que tenía movimiento. El movimiento parecefortalecer el afecto, aunque mucho menos significativamente que el simple tacto.
El sentido común sugiere que el calor del cuerpo humano de la madre juega un papel con el fortalecimiento de estas...
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