el beso de judas

FONTCUBERTA, Joan.
El beso de Judas. Fotografía y verdad. Barcelona: Gustavo Gil, 2009.

“Como un lobo con piel de cordero, la autoridad del realismo fotográfico pretende traicionar igualmente a nuestra inteligencia. Judas se ahorca agobiado por los remordimientos. ¿Reaccionará la fotografía a tiempo para escapar a su suicidio anunciado?”.
Así finaliza la introducción del libro, aclarando eltema central de su libro: el de la verdad y, así, cobra sentido el título de la obra.
Fontcuberta nos llama la atención sobre la trayectoria que han tenido los usos de la fotografía a lo largo de las etapas históricas. La fotografía nace para ofrecer verdades visuales sobre el mundo pero, poco a poco, esta visión se va transformando en otra donde toman importancia las situaciones personales dequien dirige las cámaras, adquieren protagonismo.
“El punctum nace de la persona”
Joan Fontcuberta critica la creencia de que la cámara no miente. En su libro nos vacuna contra el exceso de realismo de la fotografía, sembrando dudas e incertidumbre sobre la veracidad del registro fotográfico.
A través de los ocho capítulos del “El beso de Judas”, Fontcuberta realiza una reflexión sobre estacuestión.
A lo largo de la introducción, a modo de prólogo, el autor pone de manifiesto
que “en el inicio de toda teoría hay siempre elementos autobiográficos” y, basado en su propia experiencia nos obliga a abrir bien los ojos, a ser escépticos ante la imagen fotográfica.
A lo largo de la historia, sin herramientas como Photoshop ya se produjeron retoques y alteraciones en la imagen original. Hoyen día toda imagen es manipulable y eso lo sabe todo el mundo, así que dudar de lo que vemos se convierte en imprescindible.
Cuando realizamos un disparo y obtenemos el registro de luz sobre los objetos que tenemos por objetivo, tenemos a nuestra disposición una pieza de engaño, un objeto del que podemos extraer miles de historias y anécdotas
Al realizar cada disparo nos convertimos en pecadores,quienes rompen con las reglas al captar momentos de la vida real y convertirlos en mentiras, en una alteración de la realidad.
“La fotografía, entonces, miente porque no sabe hacer otra cosa” y lo importante es el control del fotógrafo para imponer una dirección ética a su mentira.
FONTCUBERTA, Joan.
El beso de Judas. Fotografía y verdad. Barcelona: Gustavo Gil, 2009.

Enfocar, encuadrar,seleccionar el momento del disparo y, crear, es ya una manipulación. Hay distintos tipos de manipulación: la manipulación del mensaje (del soporte físico) con el fotomontaje, la manipulación del objeto (lo fotografiado) con las reconstrucciones, y la manipulación del contexto (la situación y el entorno) con las alteraciones del espacio y del tiempo.
El autor muestra su experiencia con las“falsificaciones” y narra cómo intentó desenmascarar el paradigma de verdad con que se erigen los museos creando una exposición sobre una tribu indígena que no existía en realidad y que él inventó y documentó a modo de verdadera con toda una serie de elementos que afrontaban al espectador con sus rutinas y automatismos de interpretación de la realidad. Lo que quería demostrar con esto fue que la objetividadno existe.
Se ha considerado a la fotografía por diferentes culturas y épocas de manera muy diversa; lo que revela la veracidad del mundo, o un engaño, se la relaciona con supersticiones y magias que temen un robo del alma, transgresiones de normas o peligrosos riesgos para la intimidad y seguridad de las personas.
Desde los años 70 se empezó a cuestionar el concepto de expresión individual ypronto irrumpieron manifestaciones de interpretaciones propias de la experiencia de esa realidad.
Sin embargo, “la fotografía se ha visto sobre todo como un espejo con memoria”.
“Fotografiar, en suma, constituye una forma de reivindicar lo real, de extraer lo invisible del espejo y de revelarlo”.
En los cuentos infantiles tenemos el espejo de la madrastra de Blancanieves, el cual está...