“El Buscón”: Conversos Y La Imposibilidad De Salvamiento Salvo En Apariencias.

“El Buscón”: Conversos y la imposibilidad de salvamiento salvo en apariencias. Gabriel Ribet

El autor del buscón, Francisco de Quevedo, es un hidalgo que, como buen hombre de su época, sepresenta etnocentrista. Él -como su tiempo- aborrece judíos, moros y conversos y lo deja muy claro en su novela. El protagonista y la mayoría de (los extraños y ridículos) personajes que lo rodean sepueden interpretar como conversos, a saber: -Diego Coronel, conocida familia conversa[1].
-Licenciado Cabras, quien no come cerdo[2]. De este modo, podemos tomar a Cabras como pobre, o bien como uncripto-judío.
-Clérigo poeta, quien versa “que es hoy el señor san Corpus Christe?” errando en la tradición cristiana. Situación que solo fuera posible si el clérigo contiene impurezas en su sangre.-Tío verdugo, quien vivía en las fronteras de las antiguas juderías[3]
-Padre barbero-ladrón y madre alcahueta, ambos pagan por sus ‘fechorías’ ante el santo oficio.
Estos y otros personajes(Poncio de Aguirre, maestro de esgrima, cuasi esposa, la cofradía, etc.) van construyendo el imaginario de converso propio de la época. Sujetos que tienden a la ‘maldad’, a la estupidez y a cualquierdefecto que cualquier cristiano -hecho y derecho- no mantiene en sus costumbres. Sin embargo, este imaginario se representa más explícitamente y con más ahínco, en la figura de don Pablos.Quevedo deja de lado el hambre, ahora se pondera la honra y honor como el motor del pícaro, por lo tanto aflora la vergüenza –de cara a la galería-[4]. Para don Pablos, su origen es ruin, es menestereliminarlo o bien disfrazarlo para poder ser un caballero[5].
A través de toda la narración de la “La historia de la vida del buscón llamado don Pablos” el protagonista busca el camino para llegar aser un caballero. Para él, no habría más impedimento que crearse así mismo, y para esto es necesario ir dejando atrás los detalles que no ayudan. El desconocimiento de la casa paterna, el negar la...