El Calcio

EL CALCIO

Incluso si en el entorno de nuestra sociedad, la cosa más oída es que hay que beber leche y tomar productos lácteos para obtener suficiente calcio de nuestra dieta para prevenir losproblemas con los huesos, la auténtica verdad es que en los países donde hay un consumo de leche y productos lácteos que no cesa de aumentar (sobre todo los países occidentales), los niveles deosteoporosis entre la población es de las más altas y continúa creciendo.
Tener el nivel óptimo de calcio en los huesos no es sólo una cuestión de cuanto calcio obtenemos gracias a los alimentos, sino quetambién es una cuestión de cuanto calcio perdemos a causa de la ingestión de alimentos que acidifican nuestro organismo (proteínas animales, cafeína, teína, sal de mesa, azúcar blanca, harinas refinadas,aceites refinados, grasas refinadas y trans…); obtener una cantidad suficiente de vitamina D (ligada al calcio) y de magnesio (que ayuda a fijar el calcio en los huesos); y por terminar, tomar losbuenos ácidos grasos esenciales que ayudan a asimilar las vitaminas liposolubles.
El problema con la leche y los productos lácteos es que, aunque tenga un nivel elevado de calcio, tienen también unnivel elevado de proteínas animales en su composición que hace que no aprovechemos el calcio ofrecido por esos productos. Primero porque nuestro organismo tiene que digerir todas esas proteínas y cuyoproceso provoca una acidificación de nuestro organismo. Y además porque compramos productos lácteos muy procesados y descremados lo cual impide que obtengamos otras vitaminas que son esenciales parapoder aprovechar el calcio. Por no mencionar igualmente la relación, científicamente demostrada, que existe entre el consumo de productos lácteos y los cánceres de mama entre las mujeres y de próstataentre los hombres.
La digestión de las proteínas (tan presentes en los regímenes alimentarios habituales hoy día: carne, pescado, huevos, charcutería, lácteos…), obliga a nuestro organismo a trabajar...