El cantar De el Mio Cid

Todos dan sobre la fila en que está luchando Pedro Bermúdez. Son trescientas lanzas con pendones, y de sendos golpes mataron a trescientos moros. Al revolverse cargan otra vez y matan otrostrescientos. El rey, alzando la diestra, se santigua:
-¡Válgame San Isidro! ¡Y cuánto me alegro de esas inmensas ganancias que ha hecho el Campeador y de sus hazañas! Los caballos con que me obsequia, losacepto. Pero lo que complace al rey, a Garci Ordóñez le pesa:
-Se dijera- observa- que no hay un solo hombre vivo en tierra de moros según pone y dispone a su guisa el Campeador. Y el rey dijo alconde:
-Callad ya, conde; que me sirve mejor que vos en todo caso. Y Minaya, el esforzado varón prosiguió entonces:
-Si os pluguiese, oh rey, el Cid os pide merced de que dejéis sacar a su mujer, doñaJimena, y a sus dos hijas del monasterio en que las dejo, y llevárselas a Valencia. Entonces hablo el rey así:
-Pláceme de corazón. Yo les mandare las provisiones mientras viajen por mi reino, y lasguardaré de todo daño y afrenta: cuando lleguen a la frontera estas damas, entonces cuidareís de ellas vos mismo y el Campeador. ¡Ea, pues, mesnadas y toda la corte, escuchándome!: No quiero quepierda nada el Cid. A todos aquellos que le reconocen por señor, les restituyo cuando les había confiscado; queden en posesión de sus bienes doquier que se hallen al lado del Cid; les aseguro que norecibirán mal ni daño grave; y todo eso lo hago por tal de que sirvan bien a su señor. El que en buen hora nació se da prisa, viste la sobregolona de seda, deja ver sus lenguas barbas; ensíllanle a Babiecay lo ponen todos los arreos. Monta el Cid, y sale armado con armas de pelo. Ya cabalga en el nombrado Babieca, y da una carrera tan veloz que a todos deja maravillados. Desde ese instante fue famosoen toda España Babieca. Al terminar la carrera, el Cid baja del caballo y se acerca a su mujer y a sus hijas. Doña Jimena se le arroja a los pies.

Autor: Anónimo
Libro: “Español 3 Lengua y...