El carnaval de edgar neville
Si hay alguien que amó profundamente el Carnaval, ese fue Edgar Neville (1899 – 1966), un personaje singular de cuna aristocrática, ingenioso, creativo y polifacético: fue diplomático, novelista, autor teatral, humorista (trabajó en la mítica revista de humor “La Codorniz”), y miembro destacado -junto con Enrique Jardiel Poncela, Miguel Mihura, Antonio Lara de Gavilán(Tono) o José López Rubio, entre otros- de la llamada “otra Generación del 27”, al que su adscripción al bando de los ganadores de la Guerra Civil española, hicieron que fuera despreciado por la intelectualidad de su época y nunca fuera incluido en la Generación del 27 “oficial”.
Su inquietud artística le acercó al cine, donde ejerció como guionista, productor y también director –llegó inclusoa trabajar en Hollywood contratado por la Metro-Goldwing-Mayer como guionista y adaptador de las versiones en español de los filmes de la productora puesto que, al despuntar el cine sonoro, todavía no existían modernos sistemas de doblaje -. En su etapa americana entabló una gran amistad con Charles Chaplin quien le presentará a los grandes actores del Hollywood de la época: Douglas Fairbanks,Mary Pickford, Joan Crawford...
Neville es un hombre de arrolladora simpatía, amante de la buena vida, las mujeres y brillante en sus relaciones sociales, siendo esta personalidad la que determine desde su juventud esa pasión por el Carnaval y la que justifica que escriba el guión y dirija la película Domingo de Carnaval (1945).
El argumento de esta comedia policiaca transcurre en el domingode carnaval que indica el título, cuando una avara prestamista es asesinada en su casa. Un policía (Fernando Fernán Gómez) sospecha que Nemesio (Joaquín Roa), un vendedor de relojes que adeudaba una gran cantidad a la anciana, es el principal sospechoso del crimen. La hija de éste, Nieves (Conchita Montes), decide investigar por su cuenta.
Con Domingo de Carnaval (1945), junto con laspelículas La torre de los siete jorobados (1944), y El crimen de la calle Bordadores (1946), Neville realiza una trilogía de intriga y misterio de tipo policiaco, a las que asigna un nexo de unión común: todas están ambientadas en Madrid (ciudad que le vio nacer y por la que siente un cariño especial).
La intriga, el asesinato y su proceso de investigación descritos en Domingo de Carnaval no son másque una excusa que utiliza Neville para la descripción de ambientes y personajes del Madrid viejo, a la vez que le permite evocar su afición por el Carnaval -una práctica prohibida por el nuevo régimen de Franco- cuando recrea el Madrid de carnaval de principios del siglo XX.
Neville evoca los carnavales presentes en su experiencia personal, incluso en épocas de prohibiciones que le parecíanabsurdas. Aunque fuera recluido en los salones de alguna distinguida mansión, Edgar Neville siempre gustó del disfraz, del cambio momentáneo de personalidad hacia tipos estrafalarios y la vuelta al revés de un mundo ajeno a lo serio y solemne durante unos días de disfraces, bailes y desfiles callejeros propios del periodo carnavalesco.
Domingo de Carnaval es una película cercana al realismocotidiano con ciertos toques de cine negro que retrata con fidelidad los ambientes, habitantes, los lugares carismáticos del Madrid de 1917 cuyos personajes, aunque algo tipificados, se mueven por decorados que simulan patios vecinales, tabernas o en exteriores reales como la Plaza de Cascorro. A lo largo de la película se describen situaciones reales: los serenos gallegos al acabar su jornada, eltrajín de la venta ambulante en el Rastro, los hurtos de los carteristas, la picaresca de los charlatanes, los fotógrafos callejeros....
Neville abandona las tendencias cinematográficas dominantes en los cuarenta y cincuenta –principalmente, el cine histórico de exaltación nacional-, sus películas buscarán el realismo social, la tradición popular, la bohemia y, sobre todo, el protagonismo de...
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