El chacon

Crónica auriazul
Medio día, de un domingo común pero muy especial, el sol mandaba sus rayos de luz, luz que iluminaria a los once jugadores auriazules.
Las doce en punto marcaba elreloj el himno universitario había recorrido los túneles del glorioso estadio, el balón, simple circunferencia en el centro del campo.
Nervios corrían por las venas de los rivales, el silbatocanto y así inicio el final. Los primeros quince minutos fue un ir y venir por parte de los dos equipos, hasta que un penal bien cobrado, adelanto en el marcador al equipo de casa, sin embargo tras pasarescasos cinco minutos un erro por parte de la defensa volvía a poner el marcador empatado, jugada tras jugada error tras error el primer tiempo acabo .
Quince minutos de descanso, los vestidoresrecibían a los jugadores exhaustos, el entrenador alentaba y dando regaños les hablaba a sus muchachos uno por uno fue retomando la misma confianza con la cual habían pisado la cancha.
El descansohabía terminado y la afición ansiosa porque comenzara de nuevo el partido, el equipo visitante tomo el balón y comenzó el segundo tiempo, los esfuerzos por ambos equipos crecieron y los cambios noeran de esperar, el balón se negaba a tocar de nuevo las redes, prefería besar los postes del arco, desesperados los locales gritaban y alentaban al equipo con canticos. Hasta que un joven con el numeroquince en el dorsal, tomo el atrevimiento al minuto setenta, grito por el balón, alzo la vista condijo de manera perfecta logro ser pasar un rival, al siguiente le paso el balón entre las piernaspara volver a repetir la dosis a un tercer rival, miro la portería y colgó el disparo en el ángulo superior derecho.
Había marcado el segundo gol del equipo el estadio sabia que el partido habíaterminado, la afición enloquecida siguió alentando al equipo, el juez del partido pito el fin a las dos de la tarde.
Veinte minutos después el capitán del equipo recibía el trofeo de manos del...