el criminal y sus jueces

FRANZ ALEXANDER Y HUGO Staub, "el criminal y sus jueces"

Publicado por primera vez en Der Verbrecher und seine Richter. Ein psychoanalytischer Einblick in die Welt der Paragraphen (Viena: Internationationaler Psychoanalytischer Verlag, 1929), xvii-xix.

En: Kaes, Anton. Jay, Martin, Dimendberg, Edward. La República de Weimar Sourcebook . University of California Press, 1994. 734f pp.

Yano es necesario tratar de justificar el psicoanálisis hace afirmaciones en la comprensión de los enfermos mentales y en la extensión que les ayuda terapéutica.

Sin embargo, no hace tantos siglos histeria todavía pertenecían a un ámbito distinto de la medicina, sino que era un fenómeno en el que se suponía que sólo los tribunales de justicia para ser competente para emitir un juicio. La mujer quesufre de histeria se llama una bruja y ella fue castigado como tal, el castigo era severo, más severa que la impuesta hoy a un asesino. No es improbable que nuestro tratamiento del criminal sufrirá un cambio similar en el futuro. El hecho de que en el "dudoso" de los casos hoy en día un perito médico (es decir, un psiquiatra) se le pide generalmente por el tribunal de opinión es el primer paso enesta dirección.

Un conocimiento más profundo de la psicología del criminal aumentaría considerablemente el número de esos casos "dudosos". Sin embargo, nuestra súplica para una mejor comprensión del criminal parece requerir alguna justificación. ¿No es el criminal una amenaza pública? ¿No debería el interés que tenemos en él se limita a tratar de poner lo inofensivo y que el castigo que se leimpone servir de ejemplo a los demás? Así, un estudio más profundo de la personalidad criminal podría parecer a primera vista como nada más que un lujo, una manera de despilfarrar celo científico de uno. ¿No es cierto que tout comprendre c'est tout pardonner ? ¿No es verdad que el psicólogo que se esfuerza por comprender el criminal debe primero ponerse en el lugar del criminal, o como decimos enel psicoanálisis, tiene que identificarse con el criminal? Incluso se podría sospechar que esa psicóloga trata de ayudar al delincuente en lugar de la sociedad, por lo que el psicólogo se abre a la sospecha de deslealtad a la sociedad.

Los autores esperan que en el curso de este estudio oi que tendrá éxito en la limpieza de sí mismos de cualquier sospecha, sino que desean, sin embargo, paratratar de probar en el principio de que la comprensión psychologicaI del penal no ayuda a todo el penal, pero, en / 735 / Por el contrario, sirve a los intereses de la sociedad. Para hacer esto vamos a tener que desviarse de nuestra principal línea de pensamiento, pero esta desviación nosotros proporcionaremos por cierto con algunas ideas básicas que demuestren la necesidad de una criminologíapsicoanalítica.

Somos justificados, a nuestro juicio, en el supuesto de que una condena en un penal que generalmente se percibe como sólo presupone la comprensión psicológica de la persona responsable del hecho juzgado, es decir, presupone un conocimiento de los motivos que subyacen a la acción determinada. Un mismo acto puede ser aprobada o condenado, dependiendo de los motivos subyacentes. Alabamosel asesinato del enemigo en la guerra, que aconseja un asesinato cometido en defensa propia, a veces perdonamos a la muerte de una persona cuando se hace en un estado de afecto comprensible, pero el asesino que mata para robar es condenado por unanimidad. Por lo que el acto en sí mismo se refiere, es idéntica en todos los casos citados; nuestro juicio sobre el mismo parece depender simplementesobre los distintos objetivos conscientes que tiene y sus diversas motivaciones emocionales. Sin el conocimiento de estas motivaciones se es incapaz de formarse una actitud hacia un acto determinado. La principal pregunta si un acto determinado es él consideraba criminal depende enteramente del diagnóstico psicológico que hacemos. Esta importancia primordial de la psicología por el cual se guía el...