El cuerpo en la vejez

INTRODUCCIÓN

Cada día encontramos en nuestra sociedad cierto culto al cuerpo joven (delgado, sano, con cierta “belleza”), hecho que se ve reflejado en las propagandas televisivas, en el espectáculo, en los desfiles de moda, y en cada uno de los lugares de nuestro entorno. Toda esta reproducción y venta de imágenes lleva a concebir al cuerpo joven como inmortal. Esta glorificación de losvalores juveniles conlleva la negación rotunda del fin del cuerpo y el enmascaramiento del mismo mediante las imágenes, por la inevitable sensación que causa dicho fin.
En la actualidad nos vemos influenciados por un “bombardeo” constante de tendencias a estar en forma, a guiarnos por determinados prototipos de belleza que nos llevan a sentirnos pertenecientes a una sociedad. Sociedad en lacual si no estás a la moda, si no tenés un cuerpo apetecible, te sentís excluido, totalmente “afuera” de la misma. Parece ser que la actividad física tiene una alta participación en esto de mitificar el cuerpo joven mediante el movimiento, el acondicionamiento y mantenimiento físico, y el desarrollo de las capacidades motrices, y esto es en parte justificable si se reconoce que la actividadfísica tiene la virtud de atrasar ciertos deterioros funcionales que acompañan el proceso de envejecimiento.
La sociedad construye, por lo tanto, los estereotipos de belleza, cuerpo y salud, de tal forma que solo se valoran los cuerpos jóvenes, al extremo de que el paso de los años hay que disimularlo como sea, y al costo que sea, existiendo un deseo de permanecer en este estado de la vida, demanera que las marcas que deja el tiempo en el cuerpo resultan inaceptables.
Nos encontramos de esta manera, con un ser humano que ha tratado de prolongar la vida y de retrasar lo más posible la vejez y la muerte; un ser que tiene la idea primordial de rejuvenecer.
¿Qué ocurre entonces con el anciano? Al decir de David Le Breton “El anciano se desliza lentamente fuera del camposimbólico, deroga los valores centrales de la modernidad: la juventud, la seducción, la vitalidad, el trabajo.”[1]
Por lo tanto, sentir que este cuerpo que envejece nos pertenece, “sentirse uno consigo mismo”, y darle palabras al mismo es una tarea difícil que merece una gran reflexión.
“El envejecimiento, término occidental, marca la progresiva reducción del cuerpo, una especie devasallaje a una dualidad que opone sujeto y cuerpo y que lo hace bajo la dependencia de este último.”[2]
Esto me ha llevado a pensar que uno de los grandes problemas que existen en la vejez es el hecho de no aceptar su cuerpo como tal, el gran afán por verse joven y no poder hacerlo, y por querer volver el tiempo atrás.
Desde aquí parte mi interés por el tema, lo cual lleva a plantearmeciertas interrogantes que intentaré responder a lo largo del trabajo: ¿Es posible que el/la anciano/a pueda integrar al cuerpo como parte de su ser y sentirse sujeto y cuerpo al mismo tiempo? ¿Cuáles son los factores que van a incidir en esta imagen que tiene de sí mismo? ¿Qué tanto influye la mirada del “otro” en la manera en la que el anciano concibe su “vejez”? ¿Puede el anciano concebir la vejezde una forma “productiva”? ¿Cómo se concibe el tiempo en la “vejez”? ¿Existen diferencias entre el adulto mayor “cuidado” en su ámbito familiar y aquel que es “cuidado” en un residencial para ancianos? ¿Cómo es vista la “sexualidad” en la vejez?

DESARROLLO

Para comenzar a desarrollar la temática creo que lo primordial es hacer mención a la noción de cuerpo y vejez.
“Sin elcuerpo, que le proporciona un rostro, el hombre no existiría. Vivir consiste en reducir continuamente el mundo al cuerpo, a través de lo simbólico que éste encarna.”[3] David Le Breton refiere aquí a la importancia que tiene el cuerpo en nuestra vida, ya que a través del mismo existimos y percibimos todo lo que nos rodea. Él nos recalca que el cuerpo parece algo evidente para cada sujeto, y sin...