el deseo de la loca
de los que debiera tener,
es decir, el 50% de una vida honorable,
con hachas y espadas,
que es la que no tuve.
En cambio, lavida me otorgó
estos abrumadores años de inconsciencia
que rejuvenecieron mi alma hasta la saciedad.
Me lo permitió el deseo de volar en los crepúsculos
y en losamaneceres,
en las noches profundas,
en tus brazos y tus piernas,
con tu boca y tu garganta,
con tus manos cálidas en mi piel.
Te amé interdicta, fuera de la ley,desprejuiciada y sedienta,
anónima como mis deseos en la penumbra.
Los 25 años que tengo a veces me llevan a la ensoñación
y hasta creo que estoy viva.
Pero locierto es que muero cada noche
para reunirme con las ánimas del desierto.
Vacío, desolación, angustia,
Todo de una vez como un trago amargo
profusamente perfumadode corchos y estrellas,
de fugaces sentimientos y de una cobardía infinita
para ver y despabilarme.
Confusa y perdida…
como hoy en que los años me recuerdan
que lasoledad es un honor inconmensurable.
Vuelo cada vez más alto,
¿dónde está el último peldaño de esta noble carrera?
Me abandono, creo morir y en esa disyuntiva
milesde años golpean mi conciencia,
Muero, muero, muero, cada hora un poco más,
muero y ningún ser de este planeta podrá salvar la risa
estruendosa con que bauticé lasmañanas
en que te amé abandonada
como soy cuando desnudo mi alma
y la dejo a tu merced,
como los lirios en el agua,
como las palomas en la plaza ,
como laesperanza de los medigos.
Vivo y renazco en ese espacio invisible de tu imaginación,
en que me inventas, me descubres, me destapas,
abres la compuerta y me hallas,
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