El despertar
Era una mañana de verano muy poco común, de esas q vemos 1 o 2 veces al mes; como todos los días el señor wild se levantaba muy de madrugada, su esposa lo esperaba en el comedor con sudesayuno servido y el almuerzo empacado para su día.
Sus hijos aun dormidos descansan en sus habitaciones, el se despide con un beso en la frente y los bendice y se encamina a su destino junto con sumascotas compañeros de aventuras; toman la ruta 69 como era común siempre q salía, a medio camino se da cuenta que la ciudad se desaparece a sus ojos algo a lo que no le presto mucha atención ya q lalluvia empezaba a mojar los secos y arenosos campos de montañas.
¡¡Arboles!! Exclama con asombro, de donde han salido no los recuerdo me ¿abre perdido?, ¿será un nuevo lugar? Aun así seguiré no creo qel destino me esté haciendo una mala jugada pensó. Ya eran las 11 de la mañana y aun no encontraba en donde detenerse, de pronto su nueva camioneta comienza a fallar hasta q deja de funcionar, elcielo oscurece, una extraña neblina comienza a ocultar el hermoso paraíso silvestre, un frio escalofriante rosa suavemente su cuerpo y una voz tímida y tierna entra en su cabeza y le susurra; cazaste tupropio destino, amigo de penas y lujarías sádicas.
La alarma del auto se dispara, las luces se encienden y apagan, las puertas se abren y trancan solas, la radio se distorsiona, los vidrios empañadosno le permiten ver a su exterior, el pánico lo invade, el miedo lo inmoviliza, su corazón se paraliza. Solamente un aliento le queda para poder salir corriendo y salvar su vida. Sorprendido por loshechos decide no mirar atrás solamente poder alejarse lo más posible; la neblina lo seguía, no podía ver más allá de su propio rostro y sin darse cuenta cae al vacío. Sin esperar más, se entrega a sufinal, sumiso al dulce abrazo de la muerte pide por la vida de su familia y descansa en un sueño sepulcral.
Quien sabe cuál ha sido el tiempo q ha pasado, s a despertado en una cabaña vieja, húmeda...
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