El director de escuela

INFORME

“La Dirección Escolar en el contexto de la escuela actual “

El presente INFORME aborda la dirección escolar desde una perspectiva de futuro, partiendo de la idea fundamental que la educación debe dar respuesta a los cambios sociales que se producen, adelantarse a ellos, asumiendo el dinamismo que la sociedad actual experimenta.

Este trabajo parte del análisis de la realidadactual, de la globalización como escenario de los cambios, de la incidencia que esta nueva concepción del mundo tiene socialmente y sus repercusiones en la educación y en las escuelas para dar respuesta a los retos que se plantean.

Se centra en la dirección escolar como eje vertebrador y responsable fundamental de los cambios de la institución escolar. La perspectiva elegida posiciona la tareadel director como un trabajo político-pedagógico con poder para decidir en torno a situaciones educativas complejas.

A partir de fines de la década de los ‘80 nuestra sociedad ha sufrido profundas mutaciones al interior de su estructura social, política y educativa. La desestructuración del Estado de Bienestar, la ampliación del rol del mercado, el desarrollo de una desocupación masiva, elcuestionamiento a lo público, son los ejes que evidencian claramente la sensación de inseguridad y vulnerabilidad que cotidianamente se presentan en las escuelas.

El proceso de desintegración del tejido social cuestiona convicciones inquebrantables, roles sociales e identidades. Los individuos ya no pueden ser explicados a partir de su lugar en la sociedad, como tampoco por lo que la sociedadespera de ellos.

Existe una contradicción entre su experiencia de la realidad y las normas sociales por las cuales puede ser reconocido y apreciado como lo es el trabajo y la profesión. Es decir, en este malestar contemporáneo se superponen dos padecimientos: el más visible es el que procede de las conmociones socio-económicas, pero también otro, más profundo, que remite a los efectosdestructores del individualismo moderno.

Esta época es tiempo de fragmentación social (Bauman, 2005) y, a su vez, de reconocimiento de la pluralidad. El proyecto totalizador de la Modernidad se ha visto sacudido por sus propias contradicciones y ha dado a luz a una sociedad instalada en el riesgo (Beck, 2002), en la fragilidad, en la provisionalidad. Las sociedades occidentales del mundo globalizado sonun lugar donde la diversidad ya no se cuestiona sino que se procura integrar en las estructuras preexistentes, y se muchas veces fracasa en este intento.

La naturaleza posmoderna de nuestra sociedad tiene consecuencias directas y determinantes que influyen en la forma y el contenido que debe tener los procesos educativos, dando lugar a un nuevo escenario para la participación en las escuelas.La escuela debe asumir esta nueva complejidad de lo social porque se encuentra en el centro del debate familiar pero también porque debe recuperar su lugar de “referencia común”, y por consiguiente de los principios. Lugar donde se defiendan las reglas sociales  destinadas a transformar el mundo y, sustrayendo al individuo del lugar de la necesidad, hacerlo advenir como ciudadano.

Lasociedad actual presenta nuevos e inquietantes desafíos a la tarea educativa de la Escuela; el primero de ellos podría estar en los límites entre la socialización primaria que se lleva a cabo en la familia y la socialización secundaria que tiene lugar en la escuela.

La incorporación de la mujer al trabajo remunerado y a la vida pública ha provocado el ingreso muy temprano de los niños y niñas enla institución escolar. Ello significa que la escuela tiene que cumplir funciones claras de cuidado y atención al desarrollo físico, afectivo y moral tanto como del clásico desarrollo intelectual.

Como fenómeno complementario, la omnipresencia seductora de los medios de comunicación de masas en la vida familiar provoca que en el escenario primario de la familia, el niño/a pueda acceder con...