El Drama De La Fiesta
Todo lo que existe es justo e injusto, y en los dos casos, igualmente injustificable.
F. Nietzsche - El origen de la tragedia
Pocas cosas le deben dar más bronca a un pesimista que lugares comunes como “la vida es una fiesta”. Es un problema específico del pesimismo, porque a un optimista no le daría bronca la frase “la vida es una lucha”, que definiría la filosofíapesimista, aunque el pesimista odie cualquier tipo de lugar común. ¿Pero qué es lo que le molesta al pesimista de la primera frase? Es la poca especificidad (nunca más voy a usar esa palabra en mi vida), porque uno al enunciarla está pensando en un ideal subjetivo de fiesta, no en una fiesta en general. ¿Qué es, una fiesta de cumpleaños? ¿Es la navidad (religiosa y santa) o el año nuevo (aburridaporque la paso con mi familia)? ¿La vida es un boliche en Bariloche a los dieciocho años, desenfreno, lujuria, bochinche, “no me importa nada”? ¿O acaso es “una forma de decir”, cosa de no darle vueltas al asunto? Bueno, eso último contestaría un optimista al que no le gusta discutir y que volcaría el asunto a algún tema un poco más interesante, o un poco más optimista... ¿para qué confrontar?Pero nosotros somos pesimistas, así que vamos a buscarle el sentido a la frase, o el no-sentido, por qué no. Ahí seríamos un poco optimistas, pero un toque nomás, no se entusiasmen.
Nietzsche nos viene al pelo. Algunos lo tildan como “el nihilista por excelencia”, otros como “el asesino de Dios”, pero eso poco importa en lo que vamos a tomar de él, o robar, así como él tomó o robó, deSchopenhauer, la mayoría de los conceptos que le permiten abordar el pesimismo en su obra. Hizo una suerte de comparación, en El origen de la tragedia [ 1 ], para simplificar la explicación, entre dos dioses representativos: Apolo y Dioniso (o Dionisio, como les guste). ¡Las dos almas de la fiesta! Bah, Apolo no tanto, vendría a ser el pesimista y Dioniso el optimista, el jodón. No por nada unorepresenta el cultivo de las artes y el trabajo (un aburrido, Apolo) y otro la orgía y el vino (grande, Dioniso).
Paréntesis
Mencionamos a Schopenhauer más arriba. Éste hombre quizás haya sido más claro hablando sobre el pesimismo en la vida. Claro en el sentido de mencionar esos conceptos, pero al explicarlos… un poco contradictorio. Por eso no lo podemos tomar tan en serio para tratar a lafiesta y su relación con la vida, pero es importante mencionar un poco más qué tan pesimista era. Básicamente, sostenía que el mundo funcionaba esencialmente por la voluntad. Dentro de sí mismo, el mundo, y desde nosotros, todo funciona en relación con la voluntad. Tal voluntad obra de manera libre, sin motivación, y por lo tanto ciega e irracionalmente. Y ahí compara la voluntad con las fuerzas de lanaturaleza tales como la gravedad, el magnetismo y otros, pero que en realidad son una única fuerza: la voluntad de vivir. Acá es donde viene la ola de pesimismo: la vida es dolor (eterno). La voluntad es esfuerzo infinito, un impulso ilimitado, y es por ello que nunca se puede alcanzar la felicidad o la tranquilidad. El esfuerzo está siempre, pero no alcanza. Lo que se llama goce o diversión noes más que un cese temporario del deseo. Y ese deseo, entendido como expresión de necesidad y sentimiento de privacidad, es el dolor. La vida, en resumen, para Schopenhauer, es una oscilación eterna entre deseo y hastío. El dolor es positivo. El goce y la felicidad, negativos. ¿Plantea una solución por lo menos? Increíblemente sí: acudir a la supresión de la voluntad, a su punto cero, cesar eldeseo. ¿Cómo? ¿Muriéndonos, suicidándonos? No se contagien el pesimismo. No hace falta huir del mundo, sino asentarse en un crudo escepticismo, similar al que planteaba otra figurita griega como Diógenes (el de los perros). Y no es la única solución: también la contemplación artística nos puede llevar al cese temporal de deseo, la vida ética, o, como último recurso tal vez, vivir la santidad,...
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