EL EFECTO DE LA NAVIDAD

EL EFECTO DE LA NAVIDAD*
Por: Mons. Ronald Knox**

¿Cómo sería el mundo si la Navidad no hubiera ocurrido?
Si hacéis la pregunta como una averiguación teológica, evidentemente no tenemos medios para
contestarla. Podemos suponer, sin duda, que Dios, en su gran misericordia, no habría permitido que
la raza humana siguiera en un estado de rebelión obstinada y habría planeado algún otro medio paracontrarrestar los efectos de la culpa de Adán. Pero no podemos pretender adivinar qué medios
habría empleado; la Teología es ya lo bastante difícil para que no queramos perturbar nuestra mente
con dificultades imaginarias. Por ello, cuando pregunto: “¿Cómo sería el mundo si la Navidad no
hubiera ocurrido?”, debe entenderse que me refiero al mundo de nuestra común experiencia, a la
manera que tenemosde vivir, de tratarnos mutuamente: a la especie de conducta que podríamos
esperar unos de otros. Cómo sería de diferente todo, en este año de 1953, si no tuviéramos año 1
donde empezar nuestro cómputo, si la estampa de un establo oscuro en una noche de nieve, donde
hay un trabajador y su esposa y un bebé yaciendo en la paja entre bestias, no tuviera significado
alguno.
Hoy en día siempre pensamosen términos de política. Vamos a preguntar, pues, antes que nada, qué
diferencia ha causado la Navidad en nuestras instituciones sociales. Se ha operado en los dos mil
últimos años un gran cambio en nuestras nociones de la justicia, de la libertad, de la bondad
humana, al que damos vagamente el nombre de “progreso”. ¿Qué parte de este progreso procede
realmente de la enseñanza de Cristo y toma deella su ímpetu principal?
* Sermón radiado a través de la BBC en Programa nacional, el 29 de diciembre de 1953.
** Ronald A. Knox nació en Knibworth, Leicestershire el 17 de febrero de 1888, en el seno de una familia anglicana.
Estudió en el Eton College y posteriormente en la Universidad de Oxford, graduándose en 1910. Fue nombrado
capellán anglicano del Trinity College en la misma universidad,hasta su conversión al catolicismo en 1917. Pocos
años después sería ordenado sacerdote y nombrado Capellán de la Orden de Malta, para luego ser designado
capellán de los estudiantes católicos de la Universidad de Oxford. En 1936 fue nombrado Prelado Doméstico de SS.
Pío XI, en 1951 fue nombrado Protonotario Apostólico ad instar, Doctor Honoris Causa en Letras por la
Universidad de Irlanda, ycinco años más tarde miembro de la Academia Pontificia. Escribió un sinnúmero de
artículos y decenas de libros en temas religiosos, seis novelas policiales (famoso por ellas en el mundo anglosajón),
así como libros de poesía (en inglés, latín y griego). Dictó múltiples discursos y conferencias universitarias,
particularmente notable la muy selecta Cátedra Romanes en Oxford. Ofreció variasradiotransmisiones y predicas en
escuelas, conventos y retiros. Muy reconocido es su largo trabajo de traducción (7 años) al inglés de la Biblia
Vulgata de San Jerónimo, así como la traducción del Viejo y el Nuevo Testamento de los textos primitivos. Murió el
24 de agosto de 1957 en Mells, Sommerset, donde está enterrado.
1

San Pablo, con esa manera casual e incidental que le distingue, nos da un esquema delo que habría
de representar la idea cristiana en lo que se refiere a la alteración de los valores humanos. Escribe a
los gálatas: “Todos los que habéis sido bautizados en el nombre de Cristo os habéis vestido de la
persona de Cristo; no hay más judíos ni gentiles, no más esclavos ni hombres libres, no más
varones ni hembras, sois todos una sola persona en Jesucristo.”1 En la medida en que elEvangelio
consiguió imponerse sobre el mundo pagano que le rodeaba, la barrera que separaba a razas y razas,
a naciones y naciones, había de desaparecer. Y al mismo tiempo la dignidad de la naturaleza
humana sería afirmada; todos los hombres estarían en el mismo pie, en lugar de hallarse divididos
en dos clases, una de dirigentes y otra de esclavos. Y la mujer—nos dice San Pablo en otro lugar—,...