El Espectro
- ¿Sabes cómo disfruto oír la voz de los hijos de puta como vos clamando por su vida?
- ¡Por favor don Víctor, se lo ruego! Voy a pagarle, ¡solo necesito más tiempo! Le pido otra oportunidad.
Víctor concentró sus ojos vacíos de clemencia en el rostro desfigurado a golpes de Sergio, con una mirada fría y oscura como aquel mismo callejón en uno de los suburbios más marginados de Atlanta, ysin hacer caso del llanto desconsolado del tendido hombre desenfundó su 22 y se la apoyó entre los ojos.
- No llegué hasta acá regalando oportunidades Sergio. Ya te dejé contar muchas antes.
Sin dar muchas vueltas disparó. Arrastró sus pies del cuerpo, se limpió las manos y los zapatos con un pañuelo y encaró para el auto.
Al lago señores.
Los dos matones que lo acompañaban levantaron elcuerpo y lo metieron al baúl.
- Antonio, por favor, déjame en casa. Quiero descansar. A las 23:30 dan buenas películas en TNT.
- Sí don Víctor.
Al llegar al condominio, los dos tipos enormes dejan a Víctor en la puerta, y se van. El hombre se despoja de un saco marrón enorme que usa solo para ciertas circunstancias, y se desploma en la cama sucia y percudida. El único momento del día donde puedepensar, donde existe de verdad algo humano en él, si es que aún se encuentra. Solo algunas noches. Es rutina. Busca respuestas en su interior. Trata de recordar el momento exacto donde su vida se fue al diablo. Pero es lo mismo de siempre. Un refugio interior y solo eso. Lo bueno es que logró conciliar el sueño esa noche.
Su vida es una constante de peligro y desgracias, pero ya no le importa. Es loque le toca y lo sabe. Está amoldado. Recuerda vagamente a su familia, la cual no ve hace mucho tiempo, pero le sirve, es un refugio viable para mantener la cordura. Solo cuando quiere mantenerla. No le gusta dormir por que odia tener que despertar, ya que esto implica afrontar su rutina desopilante. Se pregunta a sí mismo si alguna vez será distinto, si sentirá algo diferente en algún momento,si tendrá opción bajo alguna circunstancia. Todas las noches, luego se duerme.
II
Permiso Víctor, tengo una carta para vos. Llegó hace un par de horas.
El portero se anunciaba por detrás de la blindada puerta. Víctor se levanta de la cama aturdido por la confusión y desconcertado. El sol le pegaba en la frente fuerte a través del vidrio de la ventana, también blindada.
Si viejo, adelante. Dejalasobre la mesa.
Que tengas un buen día.
Se levantó, calzo sus pantuflas marrones agujereadas, puso a hervir el agua para un café y se sentó a leer:
“Esta es una información confidencial desde la sede de Asistencia Social de Atlanta con destino al sr. Víctor Castañeda:
Le notificamos que a horas diez y quince de la mañana del día martes 26 de marzo del corriente año ha ocurrido un terriblesiniestro automotriz que se ha cobrado la vida del sr Héctor Castañeda y su mujer la sra Victoria Flores, que iban compartiendo su vehículo Peugeot 206 azul al momento que ocurrió una fuerte colisión causada por un auto contiguo al de ellos, que acabó impactando contra un muro en construcción.
A causa de esto, queda en acuerdo que usted como es el nuevo tutor de Franco Castañeda, de 16 años, hijo del srHéctor, que en el momento de la desgracia se encontraba en la escuela. Deberá hacer cargo de su persona hasta que alcance la mayoría de edad.
Esta condición fue pautada previamente por el padre del joven.
Lo esperamos en las oficinas para llevar a cabo el procedimiento de titulación con fecha límite hasta el jueves 28.
En cuyo caso decida estar ausente, se tomarán medidas legales y seráexpuesto a investigación federal.
Desde nuestro lugar nuestras más humildes y sinceras condolencias a usted.
Fin del comunicado.”
Increíble…
No había más que decir, no había palabra alguna para emitir, Víctor se halló ante una situación realmente crítica para su trabajo, ¿tutor de un niño? Los pensamientos completamente nulos. Estaba en shock. ¿Cómo afrontar una rutina opresora de crimen por el...
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