El existencialismo es un humanismo - Jean-Paul Sartre
existencialismo de una
serie de reproches que
se le han formulado.
En primer lugar, se le ha reprocha
do el invitar a las gentes a permanecer
en un quietismo de desesperación,
porque si todas las soluciones están
cerradas, habría que cons
iderar que la acción en
este mundo es totalmente
imposible y desembocar finalmente en
una filosofía contemplativa, loque
además, dado que la contemplación es
un lujo, nos conduce a una filosofía
burguesa. éstos son sobre todo los reproches de los comunistas.
Se nos ha reprochado,
por otra parte, que subrayamos la ignominia
humana, que mostramos en todas las cosas
lo sórdido, lo turbio, lo viscoso, y
que desatendemos cierto número de be
llezas risueñas, el lado luminoso de la
naturaleza humana; porejemplo, se
gún Mlle. Mercier, crítica católica, que
hemos olvidado la sonrisa del niño. Lo
s unos y los otros
nos reprochaban que
hemos faltado a la solidaridad humana,
que consideramos que el hombre está
aislado, en gran parte, además, porque
partimos dicen los comunistas de la
subjetividad pura, por lo tanto del yo
pienso cartesiano, y por lo tanto del
momento en que el hombre se captaen
su soledad, lo que nos haría incapaces,
en consecuencia, de volver a la solidar
idad con los hombres que están fuera
del yo, y que no puedo cap
tar en el cogito.
Y del lado cristiano, se
nos reprocha que negamos la realidad y la
seriedad de las empresas humana
s, puesto que si suprimimos los
mandamientos de Dios y los valores insc
ritos en la eternidad, no queda más
que la estrictagratuidad, pudiendo
cada uno hacer lo que quiere y siendo
incapaz, desde su punto de vista, de c
ondenar los puntos de vista y los actos de
los demás.
A estos diferentes reproches trato
de responder hoy; po
r eso he titulado
esta pequeña exposición: El exis
tencialismo es un humanismo. Muchos
podrán extrañarse de que se hable aquí
de humanismo. Trataremos de ver en
qué sentido loentendemos. En todo
caso, lo que podemos decir desde el
principio es que entendemos por ex
istencialismo una doctrina que hace
posible la vida humana y
que, por otra parte, declara que toda verdad y toda
acción implica un medio y una subjetivid
ad humana. El reproche esencial que
nos hacen, como se sabe, es que ponemos el
acento en el lado malo de la vida
humana. Una señora de la que me acaban de hablar, cuando por nerviosidad
deja escapar una palabr
a vulgar, dice excusándose:
creo que me estoy
poniendo existencialista. En cons
ecuencia, se asimila fealdad a
existencialismo; por eso se declara que
somos naturalistas; y si lo somos,
resulta extraño que asustemos, que es
candalicemos mucho más de lo que el
naturalismo propiamente dicho asusta
e indigna hoy día. Hay quien setraga
perfectamente una novela de Zola como
La tierra, y no puede leer sin asco una
novela existencialista
; hay quien utiliza la sabiduría
de los pueblos que es bien
triste y nos encuentra más tristes t
odavía. No obstante, ¿hay algo más
desengañado que decir la ca
ridad bien entendida empieza por casa, o bien al
villano con la vara del
avellano? Conocemos los
lugares comunes que sepueden utilizar en este punto y que muestran siempre la misma cosa: no hay
que luchar contra los poderes establecidos
, no hay que luchar contra la fuerza,
no hay que pretender salir de la
propia condición, toda acción que no se
inserta en una tradición es romanticis
mo, toda tentativa
que no se apoya en
una experiencia probada es
tá condenada al fracaso; y la experiencia muestra
quelos hombres van siempre hacia lo
bajo, que se necesitan cuerpos sólidos
para mantenerlos: si no, tenemos la an
arquía. Sin embargo, son las gentes que
repiten estos tristes proverbios, las
gentes que dicen: qué humano cada vez
que se les muestra un acto más o me
nos repugnante, las gentes que se
alimentan de canciones realistas, s
on ésas las gentes que reprochan al
existencialismo ser...
Regístrate para leer el documento completo.