el extraño vecino

El extraño vecino
Fran Sánchez Lambea, 4º Eso B
Suena el despertador, son las 7:00h de la mañana, el sol entra por las cortinas de mi habitación poco a poco, me levanto y me doy cuenta de que vuelvo a la normalidad después de todos los acontecimientos vividos. Bajo a desayunar, mis hermanos entran en la cocina peleándose como siempre, mi madre preparando el desayuno y en mi mente solo puedopensar en una cosa ¡No volveré a mirar por la ventana!
Soy un adolescente de 16 años y vivo en una pequeña localidad llamada El Puerto de Santa María. Mi vida transcurre tranquila hasta que un día mi curiosidad hizo que cambiara mi rutina.
Miércoles por la mañana, me levanto corriendo, llego tarde como siempre al colegio y hoy es un día importante para mí, tengo la final del campeonato detenis, después de 2 semanas de intenso torneo. Las clases se me hacen largas y pesadas y solo tengo en mi cabeza el poder ganar el torneo. Las clases terminan, vuelvo a casa, almuerzo y me dirijo a las pistas de tenis. Comienza el partido, estoy un poco tenso y nervioso, empiezo a notar un pequeño dolor en mi rodilla derecha que me hace parar el partido. Después de unos días me comunican que tengo unalesión en la rodilla que me dejará fuera de las pistas durante 1 mes en el que tendré que estar en absoluto reposo.
Llegan las vacaciones de Semana Santa y estoy tan aburrido en mi casa que una tarde decido subir a la buhardilla, donde encuentro unos antiguos prismáticos. Me los acerco a los ojos y empiezo a observar a través de la ventana. No veo nada interesante, vivo en una zona muytranquila, los vecinos son los de siempre, hasta que de repente me fijo que un coche oscuro se para delante de mi casa. Sigo observando, se abre la puerta y aparece un hombre de extraña apariencia al que no había visto en mi vida. Empiezo a ampliar la lente del prismático, y puedo ver que es un tipo alto, delgado, barbudo, con una cara un poco siniestra. De repente veo como su cabeza gira hacia mi ventanay me mira fijamente, me entro un escalofrío. No pude dormir durante toda la noche. Su cara se había quedado grabada en mi mente. Era una sensación muy extraña, como un presentimiento de que algo iba a suceder.
A la mañana siguiente, volviendo de la casa de un amigo me fijo antes de entrar en casa que la cancela de enfrente está entreabierta, y no puedo hacer otra cosa que dirigirme hacia ellasigilosamente con una mezcla de nerviosismo, miedo e intriga. El jardín estaba bastante descuidado, parecía que habían removido la tierra. Me acerco a una de las ventanas donde la persiana estaba medio rota, cuando voy a mirar en el interior escucho el ruido de un coche que se va acercando hacia la casa. Mi corazón late más de lo normal, ¡Más que en cualquier partido de tenis! Mis manos sudorosas nodejan de temblar, y mis pies sorprendentemente no me obedecen. La cancela se abre del todo y decido esconderme detrás de unos cubos de basura. Escucho los pasos que se van acercando y logro entrever al hombre alto y siniestro de ayer acompañado de alguien más que no logro ver. Cuando entraron conseguí salir sin que me vieran. Llegue a mi casa con la misma sensación de miedo, sin saber realmenteporque.
¿Qué estaba pasando? ¿Estaba tan aburrido que me imaginaba cosas? Necesitaba volver a mi entrenamiento cuanto antes.
Otro día sin dormir. Han pasado las vacaciones y sorprendentemente no he vuelto a ver a mi vecino. Parece que ha desaparecido y todo vuelve a la normalidad. Después de un largo e intenso día de colegio, vuelvo a entrenar. Mi lesión de rodilla parece que está recuperada.Llego a casa casi anocheciendo, el entrenamiento ha sido duro después de un mes de descanso. Estoy agotado, no tengo fuerzas para nada y me voy a la cama. ¿Qué ha sido ese ruido? Me levanto de la cama un poco adormilado, miro el despertador y son las 3:00h de la madrugada. Voy a la cocina a beber agua y vuelvo a escuchar el ruido que creía que era un sueño. Un impulso me hace subir rápidamente a...