El futuro de la democracia
EL FUTURO DE LA DEMOCRACIA
NORBERTO BOBBIO
EL FUTURO DE LA DEMOCRACIA
Traducción de
JOSÉ F. FERNÁNDEZ SANTILLÁN
FONDO DE CULTURA ECONÓMICA méxico
Primera edición en italiano, 1984 Primera edición en español, 1986
Título original: IIfuturo delta democrazia (6/ 1984, Giulio Einaudi Editore, s.p.a, T u r í n "ISBN 88-06-05754-5
D.R.
©
1986,
F O N D O DE CULTURA ECONÓMICA, S. A. DE C.
V.
Av. de la Universidad 975; México, D. F. ISBN 968-16-2250-2 Impreso en México
INTRODUCCIÓN
Reúno en este pequeño volumen algunos escritos que hice en los últimos años sobre las llamadas "transformaciones" de la democracia. Uso el término "transformación" en sentido axiológicamente neutro, sin atenerme a un significadopositivo o a uno negativo. Prefiero hablar de transformación más que de crisis, porque crisis hace pensar en un colapso inminente: en el mundo la democracia no goza de óptima salud, y por lo demás tampoco en el pasado pudo disfrutar de ella, sin embargo, no está al borde de la muerte. A pesar de lo que se diga, ninguno de los regímenes democráticos nacidos en Europa después de la segunda GuerraMundial ha sido abatido por una dictadura, como sucedió en cambio después de la primera. Al contrario, algunas dictaduras que sobrevivieron a la catástrofe de la guerra se transformaron en democracias. Mientras el m u n d o soviético está agitado por sacudimientos democráticos, el mundo de las democracias occidentales no está seriamente amenazado por movimientos fascistas. Para un régimen democrático,estar en transformación es el estado natural; la democracia es dinámica, el despotismo es estático y siempre igual a sí mismo. Los escritores democráticos de fines del siglo XVIII contraponían la democracia moderna (representativa) a la democracia de los antiguos (directa); pero no hubieran dudado en considerar el despotismo de su tiempo de la manera que el que describieron los escritos antiguos:piénsese en Montesquieu y Hegel y en la categoría del despotismo oriental. Hay quien ha usado, con razón o sin ella, el concepto de despotismo oriental para explicar la situación de la Unión Soviética. Cuando hoy se habla de democracia occidental se hace referencia a regímenes surgidos en los últimos doscientos años, después de las revoluciones norteamericana y francesa. A pesar de ello, un autormuy leído en Italia, C. B. Macpherson, creyó poder ubicar por lo menos cuatro fases de desarrollo de la democracia moderna, desde sus orígenes decimonónicos hasta hoy. Entre los últimos escritos sobre el tema seleccioné ios que me parecieron de una cierta actualidad, aunque no estuvieran vinculados a sucesos cotidianos. Coloco al inicio, en orden cronológico, el último, que es el que da el títuloa todo el volumen. Este estudio nació como una conferencia sostenida en noviembre del año pasado (1983) en el Palacio de las Cortes de Madrid, la cual fui a impartir por invitación de su presidente, el profesor Gregorio PecesBarba; posteriormente, corregido y aumentado, sirvió para la disertación introductoria que presenté en el Congreso internacional Ya comenzó el futuro, que tuvo lugar enLocarno en mayo pasado (1984) y cuya realización se llevó al cabo gracias al profesor Francesco Barone. En síntesis, este escrito repre-
8
INTRODUCCIÓN
senta las transformaciones de la democracia dentro de la línea de las "falsas promesas" o de la diferencia entre la democracia ideal como fue concebida por sus padres fundadores y la democracia real como la vivimos, con mayor o menorparticipación, cotidianamente. Después del debate en el Congreso de Locarno considero que es útil precisar mejor que de aquellas falsas promesas —la sobrevivencia del poder invisible, la permanencia de las oligarquías, la supresión de los cuerpos intermedios, la reivindicación de la representación de los intereses, la participación interrumpida, el ciudadano no educado (o maleducado) —, algunas no podían...
Regístrate para leer el documento completo.