El Gusto
Educación Secundaria
Trabajo Práctico:
“El gusto”
Materia:
Biología
Profesor:
BEHAL, María Dolores
Curso:
3°A
Alumno/Integrantes:
GIL, Brenda SIMARI,
Candela, DUBIER, Candela MARTURANO,
Isabella SEUBART, Martina NAGORINE, Paula
GIACOMONI, Candela CABARCOS, Emilia
Fecha de entrega:
07/07/2015
“
El gusto
”
Los seres humanos tenemos cinco sentidos que nos sirven para conocer y
relacionarnos con nuestro entorno; son el gusto, la vista, el olfato, el oído y el tacto.
Los órganos de los sentidos captan impresiones las cuales son transmitidas al
cerebro y éste las convierte en sensaciones.
Con la vista notamos lo que pasa a nuestro alrededor;
con el gusto reconocemos
los sabores; con el olfato olemos lo que está en el entorno; con el oído sentimos
todos los sonidos y con el tacto reconocemos las cosas cuando las tocamos.
El gusto es el sentido que nos permite reconocer los sabores de los alimentos, por
medio de las papilas gustativas, que son pequeños bultos que se encuentran en la
base de la lengua. La sensación que un alimento produce en el sentido del gusto se llama sabor. Los alimentos pueden ser dulces o salados, ácidos o amargos.
Observen el siguiente dibujo:
Éste sentido es el encargado de captar los sabores que ingerimos. Las sustancias
gustativas que masticamos se disuelven con la saliva y son captadas por las antes
nombradas papilas gustativas que tenemos en la lengua. Cada parte de la lengua se encarga de un tipo de sabores (como la anterior imagen muestra: amargo, ácido,
dulce y salado). Es un sentido débil, que se complementa con el olfato para una
mejor sensación. Por esa razón cuando estamos acatarrados y no podemos
respirara por la nariz, apenas distinguimos el sabor de las comidas.
Existen gustos primarios:
Sabor dulce:
No depende de ninguna clase aislada de
productos
químicos. Una lista de algunos productos químicos que causan este sabor es la siguiente: azúcares, glicoles,
alcoholes
, aldehídos, cetonas, amidas, ésteres, aminoácidos, etc. Obsérvese
específicamente que casi todas las sustancias que causan sabor dulce son
productos químicos orgánicos.
Si degustamos un vaso de agua al cual se le ha agregado
azúcar
alimentaria
(sacarosa), se crea una impresión característica en la punta de la lengua que es la zona fundamental de reconocimiento de este sabor, también sobre los labios, la
mucosa de la boca a nivel de las encías inferiores. Ellas hacen secretar una saliva
espesa y viscosa. La mayor parte de los vinos son secos y no contienen azúcar
(excepto algunos blancos y licorosos). Sin embargo, a veces se perciben de esta
manera, sustancias como las ya citadas, correspondientes al
alcohol, glicerol o
trazas de fructuosa y de pentosa.
Sabor ácido:
Está causado por
ácidos
, y mientras más fuerte sea este, más intensa la sensación.
Se puede reconocer este sabor, agregando una gotas de ácido orgánico natural,
como el cítrico a un vaso de agua.
Esta sensación afecta las zonas laterales de la lengua, por debajo de la zona donde se perciben los sabores salados. Este sabor irrita ligeramente las mucosas y se
produce secreción de gran cantidad de saliva bien fluida.
Este sabor es fácil de reconocer, porque se asocia a los frutos verdes o al vinagre.
El vino es rico en diversos ácidos, que en su conjunto otorgan la característica ácida
en una amplia gama.
Sabor salado:
El gusto salado depende de sales ionizadas. La
calidad
del gusto varía algo de una sal a otra, porque las sales también estimulan otros botones gustativos en grado
variable.
Si a un poco de agua le agregamos un poco de sal de cocina, percibimos una
sensación particular, sobre todo en los bordes laterales de la lengua, que es
acompañado por una secreción fugaz de saliva.
Este sabor es casi inexistente en los vinos, pero no se debe ignorar.
Sabor amargo: ...
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