El hacerse antropologico

EL “hacerse” antropológico y la educación:
hacia la contemplación del rostro
El misterio del hombre causa estupor y admiración. El hombre posee una capacidad inmanente de autodeterminación, escapaz de ser consciente de sí mismo y de sus operaciones; a diferencia de los demás seres vivos es un ser dotado de facultades espirituales.
La humanidad está dada por la forma que actualiza la materia,pero esta forma incluye en sí, un aspecto dinámico: el hombre tiene un fundamento ontológico, su ser participado que ya es, pero no plenamente. Tenemos que tomar en cuenta que el educando se trataante todo de un hombre, de un sujeto en mudanza continua con aptitudes que va realizando de manera funcional en un proceso selectivo de libertad en situación.
La verdadera naturaleza de la vidaconsiste en luchar por continuar siendo; esta continuación sólo puede asegurarse por renovaciones constantes, la vida es un proceso de auto-renovación.
La educación descansa precisamente en el “hacerse” delhombre y se hace así posible y necesaria la autodeterminación, pero también la dirección y el seguimiento. Desde aquí, la educación toma un sentido claro, orientado al develamiento existencial yvital de la conciencia antropológica, a la captación del rostro humano.
Todo ejercicio educativo debe plantearse desde la consideración de la persona y su más íntima constitución, porque de otra forma,una educación que no tenga dichos presupuestos se denigra y cae, demerita la racionalidad del hombre.
La consideración antropológica no es ajena a la labor educativa, ya que su origen deriva de uno delos aspectos más característicos del hombre, su capacidad de perfeccionamiento por el abanico de virtudes presentes ya en su esencia y por medio del cual está en un constante “hacerse”. La educacióndebe conducir al hombre a responder y a cuestionarse sobre las preguntas inseparablemente unidad a su existencia, lo debe llevar siempre a crecer.
Por ello, es necesario construir una labor...