El hombre mas rico de babilonia

Páginas: 77 (19166 palabras) Publicado: 14 de abril de 2010
EL HOMBRE QUE DESEABA ORO
Bansir, el fabricante de carros de la ciudad de Babilonia, se sentía muy desanimado. Sentado en el muro que rodeaba su propiedad, contemplaba tristemente su modesta casa y su taller, en el que había un carro sin acabar.
Su mujer salía a menudo a la puerta. Lanzaba una mirada furtiva en su dirección, recordándole que ya casi no les quedaba comida y que tendría queestar acabando el carro, es decir, clavando, tallando, puliendo y pintando, extendiendo el cuero sobre las ruedas; preparándolo de este modo para ser entregado y que fuera pagado por el rico cliente.
Sin embargo, su cuerpo grande y musculoso permanecía inmóvil, apoyado en la pared. Su mente lenta daba vueltas a un asunto al que no encontraba solución alguna. El cálido sol tropical, tan típico delvalle del Éufrates, caía sobre él sin piedad. Gotas de sudor perlaban su frente y se deslizaban hasta su pecho velludo.
Su casa estaba dominada, en la parte trasera, por los muros que rodeaban las terrazas del palacio real. Muy cerca de allí, la torre pintada del Templo de Bel se recortaba contra el azul del cielo. A la sombra de una majestad tal se dibujaba su modesta casa, y muchas otrastambién, mucho menos limpias y cuidadas que la suya.
Así era Babilonia: una mezcla de suntuosidad y simplicidad, de cegadora riqueza y de terrible pobreza sin or¬den alguno en el interior de las murallas de la ciudad.
Si se hubiera molestado en darse la vuelta, Bansir habría visto cómo los ruidosos carros de los ricos empuja¬ban y hacían tambalearse tanto a los comerciantes que llevaban sandaliascomo a los mendigos descalzos. Incluso los ricos estaban obligados a meter los pies en los desagües para dejar paso a las largas filas de esclavos y de portadores de agua «a servicio del rey». Cada esclavo llevaba una pesada piel de cabra llena de agua que vertía en los jardines colgantes.
Bansir estaba demasiado absorto en su propio problema para oír o prestar atención al ajetreo confuso de larica ciudad. Fue el sonido familiar de una lira lo que le sacó de su ensoñación. Se dio la vuelta y vio el rostro expresivo y sonriente de su mejor amigo, Kobi el músico.
-Que los dioses te bendigan con gran generosidad, mi buen amigo -dijo Kobi a modo de saludo-. Pero me parece que son tan generosos que ya no tienes ninguna necesidad de trabajar. Me alegro de que tengas esa suerte. Es más, megustaría compartirla contigo. Te ruego que me hagas el favor de sacar dos shekeles de tu bolsa, que debe estar bien llena, puesto que no estás trabajando en tu taller, y me los prestes hasta después del festín de los nobles de esta noche. No los perderás, te serán devueltos.
-Si tuviera dos shekeles -respondió tristemente Bansir-, no podría prestárselos a nadie, ni a ti, mi mejor amigo, porqueserían toda mi fortuna. Nadie presta toda su fortuna ni a su mejor amigo.
-¿Qué? -exclamó Kobi sorprendido- ¿No tienes ni un shekel en tu bolsa y permaneces sentado en el muro como una estatua? ¿Por qué no acabas ese carro? ¿Cómo sacias tu hambre? No te reconozco, amigo mío. ¿Dónde está tu energía desbordante? ¿Te aflige alguna cosa? ¿Te han causado los dioses algún problema?
-Debe de ser unsuplicio que me han enviado los dioses -comentó Bansir-. Comenzó con un sueño, un sueño que no tenía sentido, en el que yo creía que era un hombre afortunado. De mi cintura colgaba una bolsa repleta de pesadas monedas. Tenía shekeles que tiraba despreocupadamente a los mendigos, monedas de oro con las que compraba útiles para mi mujer y todo lo que deseaba para mí; incluso tenía monedas de oro que mepermitían mirar confiadamente el futuro y gastar con libertad. Me invadía un maravilloso sentimiento de satisfacción. Si me hubieras visto no habrías conocido en mí al esforzado trabajador, ni en mi esposa a la mujer arrugada, habrías encontrado en su lugar una mujer con el rostro pletórico de felicidad que sonreía como al comienzo de nuestro matrimonio.
-Un bello sueño en efecto -comentó...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • El hombre mas rico de babilonia
  • el hombre mas rico de babilonia
  • El hombre más rico de Babilonia
  • El hombre mas rico de babilonia
  • El hombre más rico de babilonia
  • El hombre mas rico de babilonia
  • El hombre mas rico de babilonia
  • El hombre mas rico de babilonia

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS