El Hombre Mediocre

Páginas: 30 (7272 palabras) Publicado: 14 de noviembre de 2012
CAPITULO ll LA MEDIOCRIDAD INTELECTUAL.
La rutina es un esqueleto fósil cuyas piezas resisten la carcoma de los siglos. No es hija de la experiencia; es su caricatura. En su orbita giran los espíritus mediocres, evitan salir de ella y cruzar nuevos espacios, repiten que es preferible lo malo conocido a lo bueno por conocer. Su impotencia para asimilar ideas nuevas los constriñe a frecuentarlas antiguas rutinas que es una síntesis de todos los renunciamientos, es el hábito de renunciar a pensar.
Todos los individuos poseen hábitos mentales ; los conocimientos adquiridos facilitan los venideros y marcan su rumbo, en cierta medida nadie puede sustraerles. No son exclusivos de los hombres mediocres pero en ellos representa siempre una pasiva obsecuencia al error ajeno, los hábitosadquiridos por los hombres, originales, son genuinamente suyos, le son intrínsecos. Es más contagiosa la mediocridad que el talento, los rutinarios, razonan con la lógica de los demás. Reducidos a vanas sombras viven del juicio ajeno, se ignoran así mismo limitándose a creerse como los creen los demás. Los hombres excelentes en cambio desdeñan la opinión ajena en la justa porción en que se respetan lapropia, siempre más severa o la de sus iguales.
Ignoran que el hombre vale por su saber, niegan que la cultura es la honda fuerte de la virtud. No intentan estudiar; sospechan, acaso la esterilidad de su esfuerzo. Como las mulas que por la costumbre de marchar al paso, han perdido el uso del galope, la mas intrépida paciencia no hace de un rutinario pensador, la verdad hay que saberla amar ysentir. El resol de la originalidad ciega la hombre rutinario, huye de los pensadores alados, albino, ante su luminosa reverberación. La tolerancia de los ideales ajenos es virtud suprema en los que piensas, es difícil para los semicultos. Los hombres rutinarios desconfían de su imaginación santiguándose cuando le atribula con heréticas tentaciones. Reniegan de la verdad y de la virtud, si ellasdemuestran el error de sus prejuicios, muestran gran inquietud cuando alguien se atreve a perturbarlos. En todo lo que no hay prejuicios definitivamente consolidados, los rutinarios carecen de opinión, sus ojos no saben distinguir la luz de la sombra. La caja cerebral del hombre rutinario es un alhajero vacío, no pueden razonar por si mismos, como si el seso les faltara. Viven una vida que no esvivir. Crecen y mueren como las plantas , no necesitan ser curiosos ni observadores. Si la humanidad hubiera contado solamente con los rutinarios, nuestros conocimientos no excederían de los que tuvo el ancestral hominidio, la cultura es el fruto de la curiosidad, de esa inquietud misteriosa que invita a mirar el fondo de todos los abismos. El ignorante no es curioso, nunca investiga la naturaleza,sus inteligencias son como las aguas muertas se pueblan de gérmenes nocivos y acaban por descomponerse. El que no cultiva su mente va derecho a la disgregación de su personalidad. No desbaratar la propia ignorancia, es perecer en la vida. Las tierras fértiles se enmalezan cuando nos son cultivadas; los espíritus rutinarios se pueblan de prejuicios que los esclavizan. En el verdadero hombre mediocrela cabeza es un simple adorno del cuerpo, si nos oye decir que sirve para pensar; cree que estamos locos,
Es el pensamiento lo que caracteriza al hombre, sin el no podemos concebirlo,; el mediocre es solemne. En la pompa grandílocua de las exterioridades busca un disfraz para su intima oquedad. Acompaña con fofa retorica los mínimos actos y pronuncia palabras insubstanciales, como si lahumanidad entera quisiera oírlas; constreñidos a vegetar en horizontes estrechos, llegan hasta desdeñar todo ideal y todo lo agradable, en nombre de lo inmediatamente provechoso. Su miopía mental impídales comprender el equilibrio supremo entre la elegancia y la fuerza, la belleza y la sabiduría.
El hombre mediocre que renunciara a su solemnidad, quedaría desorbitado; no podría vivir; las únicas...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • El hombre mediocre
  • el hombre mediocre
  • hombre mediocre
  • El hombre mediocre
  • El hombre mediocre
  • Hombre Mediocre
  • el hombre mediocre
  • el hombre mediocre

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS