El hombre, un ser llamado a responder al misterio ontológico
Páginas: 24 (5986 palabras)
Publicado: 24 de enero de 2014
EL HOMBRE: UN SER LLAMADO A RESPONDER AL MISTERIO ONTOLÓGICO
Desde la perspectiva de Gabriel Marcel
INTRODUCCIÓN
El mundo contemporáneo, imbuido de una visión reductiva del hombre y de la creación, poco a poco ha ido cerrando las puertas a ciertos principios fundamentales que permiten acoger la profundidad de lo real y en particular aproximarse almisterio de la persona humana.
La sociedad moderna se enfrenta a una radicalización de la posición positivista que pretende dar respuesta a “todas” las inquietudes del hombre en el mundo, cerrando con ello las puertas a un más allá del conocimiento científico.
Esta pretensión de exclusivismo metodológico ha cerrado el espacio a la dimensión constitutiva del hombre que escapando a las exigenciasracionalistas y a la concepción materialista hodierna parece ser una pregunta cerrada.
La visión positivista del hombre proclama el arribo de la humanidad a la “edad madura”, a la edad científica, en donde quedan atrás como vetustas y superadas, las edades de los infantiles fetichismos y las juveniles búsquedas de un Ser Absoluto. La promoción del método positivista apoyado por los avancescientíficos y tecnológicos, reales y buenos en distintos casos, ha generado un ingenuo optimismo en la sociedad que ha dispuesto el camino para que éste modo de aproximarse a la realidad se vaya filtrando poco a poco en las distintas disciplinas del saber humano como única y exclusiva vía de conocimiento y como única fuente de expresión cultural.
La exigencia de la pregunta metafísica parece serreplegada a un plano cada vez más restringido y es catalogada como un saber que no tiene nada que aportar a la existencia del hombre. La categoría de “abstracta” ha servido para poner una mordaza a los filósofos que pretenden una reflexión que vaya más allá de lo verificable.
Viendo en esta reducción un problema al que la filosofía debe responder manifestando la actualidad y centralidad de laexigencia ontológica humana, la metafísica, y propiamente en este trabajo la voz del filosofo francés Gabriel Marcel, se alza en contra de esta reducción cognoscitiva, que tiene consecuencias nefastas en la vida del hombre. Por ello la propuesta de este trabajo es manifestar que la existencia tiene ámbitos más allá de lo sensible en donde el hombre se encuentra a sí mismo como un ser llamado a latrascendencia. Este ámbito es el ámbito del ser, que según plantea Gabriel Marcel no es solamente una categoría para entender la realidad, sino una exigencia de la misma estructura del hombre.
En este texto me propondré dar una breve exposición de la consideración según Marcel de la situación de la idea del ser, de tratar de manifestar la exigencia ontológica del hombre que se busca recuperary de buscar una vía de acceso a este misterio a la luz del misterio del encuentro personal, todo ello a la luz de los desarrollos efectuados por el autor francés en una conferencia realizada para la Sociedad de Estudios Filosóficos de Marsella intitulada “Aproximación al misterio del ser; posición y aproximaciones concretas al misterio ontológico”.1. SITUACIÓN DE LA IDEA DE SER1
Los últimos siglos de historia humana están marcados por un indudable esplendor científico. La ciencia empírica cultiva un máximo de rigor metodológico que le permite llegar a ciertos resultados productivos. Es capaz de hacer “magia”, es decir, de transformar la materia con una cierta libertad que sorprende y maravilla. Si Bacón hoy estuviese vivo diríasatisfecho que el hombre siguiendo sus consejos ha obligado a la naturaleza a decir sus propias leyes y ha sabido usar bien los instrumentos de medida para intuir e interpretar su esencia matemática.
Este esplendor científico, apoyado por una verdadera idea de progreso que aparece muchas veces interpretada acríticamente a partir de la ecuación “novedoso=bueno”, ha guiado al hombre, por un...
EL HOMBRE: UN SER LLAMADO A RESPONDER AL MISTERIO ONTOLÓGICO
Desde la perspectiva de Gabriel Marcel
INTRODUCCIÓN
El mundo contemporáneo, imbuido de una visión reductiva del hombre y de la creación, poco a poco ha ido cerrando las puertas a ciertos principios fundamentales que permiten acoger la profundidad de lo real y en particular aproximarse almisterio de la persona humana.
La sociedad moderna se enfrenta a una radicalización de la posición positivista que pretende dar respuesta a “todas” las inquietudes del hombre en el mundo, cerrando con ello las puertas a un más allá del conocimiento científico.
Esta pretensión de exclusivismo metodológico ha cerrado el espacio a la dimensión constitutiva del hombre que escapando a las exigenciasracionalistas y a la concepción materialista hodierna parece ser una pregunta cerrada.
La visión positivista del hombre proclama el arribo de la humanidad a la “edad madura”, a la edad científica, en donde quedan atrás como vetustas y superadas, las edades de los infantiles fetichismos y las juveniles búsquedas de un Ser Absoluto. La promoción del método positivista apoyado por los avancescientíficos y tecnológicos, reales y buenos en distintos casos, ha generado un ingenuo optimismo en la sociedad que ha dispuesto el camino para que éste modo de aproximarse a la realidad se vaya filtrando poco a poco en las distintas disciplinas del saber humano como única y exclusiva vía de conocimiento y como única fuente de expresión cultural.
La exigencia de la pregunta metafísica parece serreplegada a un plano cada vez más restringido y es catalogada como un saber que no tiene nada que aportar a la existencia del hombre. La categoría de “abstracta” ha servido para poner una mordaza a los filósofos que pretenden una reflexión que vaya más allá de lo verificable.
Viendo en esta reducción un problema al que la filosofía debe responder manifestando la actualidad y centralidad de laexigencia ontológica humana, la metafísica, y propiamente en este trabajo la voz del filosofo francés Gabriel Marcel, se alza en contra de esta reducción cognoscitiva, que tiene consecuencias nefastas en la vida del hombre. Por ello la propuesta de este trabajo es manifestar que la existencia tiene ámbitos más allá de lo sensible en donde el hombre se encuentra a sí mismo como un ser llamado a latrascendencia. Este ámbito es el ámbito del ser, que según plantea Gabriel Marcel no es solamente una categoría para entender la realidad, sino una exigencia de la misma estructura del hombre.
En este texto me propondré dar una breve exposición de la consideración según Marcel de la situación de la idea del ser, de tratar de manifestar la exigencia ontológica del hombre que se busca recuperary de buscar una vía de acceso a este misterio a la luz del misterio del encuentro personal, todo ello a la luz de los desarrollos efectuados por el autor francés en una conferencia realizada para la Sociedad de Estudios Filosóficos de Marsella intitulada “Aproximación al misterio del ser; posición y aproximaciones concretas al misterio ontológico”.1. SITUACIÓN DE LA IDEA DE SER1
Los últimos siglos de historia humana están marcados por un indudable esplendor científico. La ciencia empírica cultiva un máximo de rigor metodológico que le permite llegar a ciertos resultados productivos. Es capaz de hacer “magia”, es decir, de transformar la materia con una cierta libertad que sorprende y maravilla. Si Bacón hoy estuviese vivo diríasatisfecho que el hombre siguiendo sus consejos ha obligado a la naturaleza a decir sus propias leyes y ha sabido usar bien los instrumentos de medida para intuir e interpretar su esencia matemática.
Este esplendor científico, apoyado por una verdadera idea de progreso que aparece muchas veces interpretada acríticamente a partir de la ecuación “novedoso=bueno”, ha guiado al hombre, por un...
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