El imperio de lo efímero

EL IMPERIO DE LO EFÍMERO
Candidatos evangélicos y el surgimiento de las voces proféticas
Sin si siquiera intentar resolver sus problemas internos – al menos de manera precaria – la comunidad evangélica se ha lanzado a la aventura electoral y con ello ha marcado un camino sin retorno, el de la visibilización de sus falencias y debilidades. Hace ya muchos años dejó de ser la “reserva moral delpaís”, por el contrario, las numerosas situaciones de abuso de poder, de totalitarismo, de actos de malversación de fondos, tráfico de propiedades, casos de adulterio y divisiones por empoderamiento, se han convertido en la constante de la comunidad. Pero hasta hoy, todo terminaba, en el peor de los casos, en el palacio de justicia, en algún documental aislado en la televisión o en una nota deprensa de un diario local. Sin embargo, la incursión en la política de la comunidad evangélica pone en evidencia fehaciente su falta de preparación, la instrumentalización del poder político por parte de sus líderes y – lo que es peor – la ambición de poder maquillada con frases como “Dios me ha dicho” o “Dios lo quiere”.
La diferencia entre esta y otras elecciones, es que tenemos personajes que enotrora tiempo fueron aliados y ahora serán rivales. Por el partido de PPK se encuentra el tres veces fracasado Ps. Humberto Lay, por el partido de Luis Castañeda (¿se acuerdan del caso Comunicore?), se encuentra la congresista tránsfuga Mirtha Lazo (término usado por los diarios La República y Perú 21), quien pasó de “Restauración Nacional” al partido del sol solidario. En el caso del primero, sesigue esperando la confirmación de un “mensaje divino” que le fue revelado en visión y que ocasionó que todas las fuerzas de las iglesias carismáticas lo apoyaran una y otra vez y que ahora, ante el cansancio que genera las muchas batallas electorales, empiezan a cuestionar si la “visión” que vio el Ps. Humberto Lay fue más un producto de su imaginación que de llamado divino. Por otro lado, elaceptable trabajo de Mirtha Lazo se ve eclipsado por la escasez de rendiciones de cuentas de su transfugismo, ¿cómo y en qué momento pasa de un partido evangélico al partido de Castañeda? ¿Qué pasó con los votos de confianza que la comunidad evangélica por entero depositó en ella? Pero parece ausente una explicación, de pronto no la necesita pues tiene como respaldo una comunidad eclesial queobedecerá sin cuestionar mientras su nutritivo diezmo llene las arcas del templo.
La mención especial la tiene el Ps. Julio Rosas, el candidato con el número 1 en la lista de Keiko Fujimori. Si, el partido político que reúne a más de un corrupto, el partido político que traicionó a la comunidad evangélica en 1992, el partido político que generó una ola irrefrenable de violencia en el sur del país y queocasionó numerosas muertes, entre ellas las de evangélicos y evangélicas que fallecieron defendiendo su casa y a sus hijos e hijas. Pero esto no es todo, el Pastor que predicaba a todos sus subordinados a no intervenir en política, ahora contradice totalmente su discurso en una acción algo predecible, se sabe que se encuentra en varias situaciones de corrupción y potenciales juicios que sólo lainmunidad parlamentaria podrá detener, al menos por cinco años. El Pastor Julio Rosas representa una voz evangélica, pero no la totalidad como le ha hecho creer a Keiko Fujimori, por el contrario, gran parte de la comunidad evangélica en sus redes virtuales lo rechaza pues conoce su “trabajo” y sus actos de malversación maquillados y embestidos de un autoritarismo que ha mantenido en silencio a másde un hermano y hermana, al menos hasta ahora.
¿Qué podemos concluir en primer lugar ante esta situación? Primero, como señalará el sociólogo Víctor Arroyo en su momento, la democracia al interior de los partidos políticos es una gran farsa. El APRA sólo es una muestra de cómo se trafican los cargos y los nombres en las listas, para los poco entendidos, la postulación al congreso y la...