El imperio ruso
1. EL IMPERIO RUSO
De las potencias europeas, Rusia fue la que menos concesiones hizo al espíritu liberal decimonónico. Hasta 1906 el zar permaneció como autócrata todopoderoso apoyado por la burocracia, la nobleza hacendada y la inercia política del campesinado. La lenta transformación socioeconómica, dibujando una sociedad extremada donde no tenían cabida las clasesmedias, habría contribuido a ello.
Las ideas modernas y revolucionarias, sostenidas por una minoría intelectual, entraban trabajosamente en las aldeas campesinas donde el zar se consideraba todavía un ser sobrehumano. Andando el tiempo, sin embargo, la etapa reformista iniciada por los zares en la segunda mitad del siglo XIX se tornaría en revolucionaria.
1.1. ENTRAMADO ÉTNICO Y FRONTERASEN EXPANSIÓN
La Europa del Este estaba simbólicamente representada, a mediados del siglo XIX, por la Rusia del zar Nicolás I asentada sobre un vastísimo territorio entre dos continentes. Sus fronteras europeas fueron diseñadas por el Congreso de Viena para que limitara al norte con Suecia, al oeste con Prusia y el Imperio de Austria, y al sur, rebasando la frontera caucásica, con Turquía, conla que se mantendrá en permanente tensión por el dominio del mar Negro y la salida al Mediterráneo.
Sus posesiones en el continente asiático no eran menos representativas de lo que sería un Imperio en expansión. Ya en la primera mitad del siglo hubo una ocupación del Turquestán para dirigirse con posterioridad hacia el sur, donde chocarían con los británicos. Su asentamiento a lo largodel norte de Asia obliga a rastrear sus límites al otro extremo del continente en Manchuria y la isla de Sajalín, conseguida en 1905. Tampoco sería fácil la permanencia en esta área donde Japón daría la primera lección bélica al osado europeo en 1904.
Esta extensa territorialidad estaba habitada por pobladores de muy distintas etnias. Los más numerosos eran:
los eslavos, a los que pertenecíanlos «grandes rusos» que forman el Estado y el Imperio con su emigración;
los «pequeños rusos» en torno a Ucrania;
y los «rusos blancos» o bielorrusos localizados en Polonia y el Báltico.
El grupo de los caucásicos era de lo más variado; en él se integraban georgianos, armenios y azerbaijanos. El mosaico quedaba completado por los amarillos de Asia y las regiones del hemisferio norte; losuralo-altaicos, como turcos o tártaros; y las dispersas pero activas minorías de alemanes y judíos.
En este complejo panorama dos tendencias se evidenciarían como una constante. Por una parte, el «nacionalismo», tanto centrífugo —de bálticos, polacos, bielorrusos y «pequeños rusos»— como centrípeto o paneslavista de los «grandes rusos», en justificación de su política expansiva. Por otraparte, la «rusificación» acometida por los zares y sus colaboradores como política concreta contra la autodeterminación nacionalista.
1.2. ALEJANDRO II ANTE EL REFORMISMO Y LA OPOSICIÓN (1855-1881)
La andadura política de Alejandro II se inició a raíz de la derrota rusa en la guerra de Crimea (1853-1856), lo que le obligó a pensar rápidamente acerca de las carencias fundamentales que habíanconducido a este fracaso. En función, por tanto, de necesidades más que por convicción, su reinado comenzó con un amplio programa de reformas socioeconómicas, administrativas y culturales, para terminar con una oleada de violencia revolucionaria de la que él mismo caería víctima.
Entre todas las reformas, la abolición de la servidumbre, que liberaría a 22,5 millones de siervos de la dependenciade los terratenientes privados, se contempla como la más esencial. Los edictos de emancipación comenzaron en 1858, fecha en la que el zar liberó a los siervos de la corona; continuaron el 3 de marzo de 1861 con la emancipación de todos los siervos campesinos; y concluyeron en 1863 con la de los siervos domésticos. El régimen de esta liberalización no fue del todo satisfactorio al afectarles de...
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